Caprecom compra costosa clínica, pero no paga deudas en mora

Caprecom tiene enormes deudas en mora en Caldas, pero hace pocas semanas compró por 1.300 millones de pesos la Clínica Manizales,  llamada Clínica Caprecom, que paradójicamente no está funcionando.

Colombia.com - Actualidad
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Caprecom tiene enormes deudas en mora en Caldas, pero hace pocas semanas compró por 1.300 millones de pesos la Clínica Manizales,  llamada Clínica Caprecom, que paradójicamente no está funcionando.

Mientras tanto, está en riesgo la atención a más de 500 mil usuarios, a quienes en muchos casos solo reciben para urgencias porque los centros hospitalarios se quedaron sin recursos, según lo denunciaron dirigentes gremiales, sindicales y comunidad.

Una de las situaciones críticas se vive en el Hospital Infantil de Manizales, que hace dos meses espera que Caprecom le cancele 1.700 millones de pesos. Como ese dinero no llega, el hospital para los niños fue puesto a la venta y está en riesgo la atención, especialmente para menores con cáncer y otras enfermedades terminales.

El gerente del Hospital Infantil, Juan Carlos Gómez, dice que no se explica cómo Caprecom compra un hospital que no funciona, pero no cancela las deudas para garantizar la operación de los que sí están abiertos.

Gómez dijo que la entidad a su cargo no ha suspendido los servicios, pero aclaró que hoy no tiene contratos con varias EPS, ante lo cual no puede atender a los afiliados a esos organismos y se encuentra a la espera de que Caprecom le pague las deudas.

Sobre la compra que hizo la EPS Caprecom de la ahora llamada Clínica Caprecom, consideró que la entidad está en su derecho, siempre y cuando cumpla las obligaciones que tiene con otras entidades. "Creo que para abrir la clínica no lo pueden hacer con los recursos que deben a otras entidades, primero deben pagarnos", señaló.

El problema no es solo para los hospitales de Manizales con los que Caprecom está endeudado. La crisis financiera para el sector salud es en todo el departamento de Caldas.

Los alcaldes y directores de los hospitales atribuyen la crisis del sector al retraso en los pagos; es el caso de la situación que afrontan los pacientes de cuatro poblaciones del norte de Caldas con trastornos de bipolaridad y que requieren con urgencia atención siquiátrica.

También son del Sisben y, según el director del Hospital de Aranzazu, Eduardo Espinosa, el problema tiende a aumentar al ser la zona del país con el mayor número de casos de bipolaridad por factores hereditarios.

Por su parte, Jorge Hernán Yepes, directivo de las Asociación de Hospitales de Caldas, insiste en que es muy grave la situación de la Eps Saludcoop, pero que es más grave la de Caprecom, a la que responsabilizan de llevar a la quiebra a los centros asistenciales y de desconocer la asistencia que se debe dar en salud por mandato constitucional.

Según sostuvo, están en peligro 500 mil afiliados en Caldas, ante lo cual advierten que a Caprecom les suspendieron todos los contratos por "malas pagas".

El dirigente sindical Moisés Gallego, de la CUT, se queja de los retrasos en los pagos de los salarios y considera que la liquidación de hospitales como el del municipio de Palestina y otros que están en proceso, obedece en buena parte a la tardanza de Caprecom en entregar los recursos.

Mientras tanto, los padres de familia de los niños con cáncer y enfermedades catastróficas deambulan por hospitales de adultos, o en ciudades como Pereira y Bogotá. Por supuesto esto les genera a las familias pobres gastos enormes de desplazamiento y alojamiento, que deben pagar con dinero que no tienen y la plata de Caprecom está invertida en la compra de un hospital que está cerrado.

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