El Parlacen se pone a disposición de Colombia en busca de la paz

El presidente del Parlamento Centroamericano (Parlacen), el dominicano Manolo Pichardo, puso el organismo a disposición de Colombia en el marco de las conversaciones de paz entre el Gobierno y las FARC.

"Ofrezco al Parlamento Centroamericano, en nuestra condición de foro político amplio y pluralista, nuestros buenos oficios en esta gestión política, así como nuestra sede y subsedes como espacios neutrales a favor de las tareas orientadas a la paz de Colombia", señaló el parlamentario en un comunicado emitido en Santo Domingo.

Esto, señaló, "con el único fin de ver consolidada la paz, la auténtica reconciliación y la concordia entre los hermanos colombianos y los pueblos del mundo".

Pichardo recordó en el comunicado unas recientes declaraciones de la canciller colombiana, María Ángela Holguín, quien llamó a Centroamérica a integrarse a las negociaciones por la paz entre el Gobierno de su país y las FARC.

Asimismo, saludó a los Gobiernos de Noruega, Cuba, Venezuela y Chile que acompañarán a Colombia en este "histórico proceso".

El presidente del Parlacen subrayó que la economía y el desarrollo social de Colombia se ven gravemente afectados por la confrontación armada que "afecta las comunidades fronterizas de los países vecinos y aleja la posibilidad de una integración económica con visión latinoamericana, impidiéndole insertarse en los procesos de integración en marcha en América del Sur".

El dominicano recordó que en agosto de 1999 el Parlacen emitió una resolución durante una conferencia en la República Dominicana para "apoyar todas las gestiones que se encaminen a la paz total de la hermana República de Colombia, ofreciendo el aporte de la experiencia obtenida por este Parlamento a efecto de contribuir a lograr el cese del conflicto armado y la consolidación de la paz".

El Gobierno de Juan Manuel Santos y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) sostendrán a partir del 8 de octubre próximo, primero en Oslo y a continuación en La Habana, un diálogo de paz con la participación de Cuba y Noruega como garantes y de Chile y Venezuela como "acompañantes".

El diálogo persigue la conclusión de un conflicto armado de 50 años que ha causado miles de muertos, mutilados y secuestrados.