Eurodiputados piden que UE condicione su ayuda a respeto de DDHH en Colombia

"El dinero de la UE se puede dar si hay garantías claras de respeto al derecho internacional, y nosotros hemos señalado graves deficiencias", indicó el eurodiputado de Izquierda Unida Javier Couso en una rueda de prensa con motivo de la visita a las instituciones comunitarias del presidente colombiano, Juan Manuel Santos.

El mandatario colombiano realiza una gira por varias capitales europeas para recabar apoyos políticos y económicos para implementar una etapa sin conflicto en su país, en caso de que las negociaciones que lleva a cabo con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) lleguen a buen puerto y se firme la paz con la guerrilla.

La UE ya se ha mostrado favorable a apoyar económicamente la implementación de la paz en Colombia como ha hecho en el pasado en otros países que han sufrido conflictos armados, aunque por el momento ha señalado que va a esperar a ver los resultados de las negociaciones para determinar el alcance y amplitud de esa posible ayuda.

El eurodiputado socialista británico Richard Howitt subrayó que para que la paz sea eficaz y duradera "debe incluir a todos los grupos, incluidos los paramilitares", y también que la restitución de las tierras de los ciudadanos desplazados por el conflicto "debe ser parte de ese proceso".

"La visita de Santos puede ser una oportunidad para nosotros de influir en ese proceso de paz", indicó sobre el papel de la UE.

Agregó que la paz "debe ser exitosa para todas las personas y todos los grupos que forman parte del conflicto" y que debe "cumplir adecuadamente con los derechos humanos".

"Nos preocupa la impunidad galopante, llevamos ya 45 asesinatos de defensores de los defensores de los derechos humanos este año", subrayó Couso, mientras que la parlamentaria de Podemos Tania González aseguró que en Colombia la "democracia está limitada a unas pocas familias con más recursos económicos" y "sólo un 10 por ciento" de los desplazados ha recuperado sus tierras.

El eurodiputado de los Verdes Jordi Sebastià pidió a Santos una protección efectiva de los activistas, que no se amplíe el fuero militar, el retorno efectivo de los desplazados, el fin del acaparamiento de tierras para que "los terrenos baldíos, tierras comunales, no acaben en manos de las grandes empresas", y el fin de los paramilitares y de la impunidad.

También instó a que se "verifique" que toda ayuda que pueda conceder la UE para la paz "se utiliza para desmontar a las bandas paramilitares", que a su juicio han sido olvidadas en el proceso de negociación con las FARC.

"Nos preocupa que bajo esas negociaciones se pueda perdonar otra serie de crímenes y barbaridades que sufren los colombianos", añadió.

El campesino colombiano Manuel Narváez ofreció un testimonio como víctima de los paramilitares, y relató cómo la violencia y la coacción que ejercen esos grupos ha obligado a muchos campesinos e indígenas a abandonar sus tierras para convertirse en "mendigos de las ciudades colombianas o exiliados por el mundo".

"No quiero que en mi nombre Santos acuerde una supuesta paz que nos dé la espalda a las víctimas" y que "no esté bajo la supervisión internacional", enfatizó.

Consideró que, en el caso de que la UE entregue fondos para la paz en Colombia, deben estar "vigilados" e incluir unas "cláusulas para obligar al Gobierno colombiano a incluir de manera relevante la restitución de las víctimas".

"Hay que poner a las víctimas en el centro del postconflicto, solo así construiremos una paz duradera y verdadera", concluyó. EFE