Gobierno reconoce "buena disposición" de campesinos para dialogar

El ministro consejero para el Diálogo Social, Luis Eduardo Garzón, señaló que durante los diálogos realizados en la población de Tibú, en el departamento de Norte de Santander, fronterizo con Venezuela, entre el Gobierno y los líderes de la protesta, se desarrolló en medio de un ambiente de "respeto" y de "confianza".

Destacó que para lograr ese clima han contribuido el Obispo de Tibú, monseñor Ómar Sánchez; el defensor del Pueblo de Colombia, Jorge Armando Otálora, así como las autoridades departamentales.

Un comunicado de la Presidencia de la República, agrega que las conversaciones continuarán este viernes en Tibú.

Por su lado, el ministro de Agricultura y Desarrollo Rural, Francisco Estupiñán, expresó a los agricultores que entiende la problemática que implica la sustitución de cultivos ilícitos, por lo que se dará prioridad a la inversión para apoyar siembras de plátano, café, maíz y yuca.

El director del Departamento de la Prosperidad Social, Bruce Macmaster, reconoció que "tenemos una población excluida y hay que trabajar por ella" y que "la reconciliación se produce con hechos".

Las protestas comenzaron hace 18 días cuando el Gobierno ordenó la erradicación manual de hoja de coca en la zona y los campesinos se alzaron en contra de esta medida, al tiempo que reclaman alternativas a esos cultivos ilegales, la declaración una Zona de Reserva Campesina y el fin de la minería y la agroindustria.

La zona del Catatumbo, fronteriza con Venezuela, es una de las más atrasadas del país y en los últimos 30 años ese territorio ha sido escenario de disputas territoriales entre guerrilleros y paramilitares.

Las protestas se concentran en Tibú, donde se han congregado unos 5.000 campesinos, según los organizadores de las manifestaciones, y en Ocaña, segunda ciudad del departamento de Norte de Santander, adonde han llegado unos 11.000 labriegos. EFE