EL BUFEO COLORADO

Bufeo Colorado - Amazonas

Delfín Rosado - Shutterstock

NADIE SABE EN DÓNDE GUARDAN SUS HERMOSOS TESOROS

El Amazonas no solo es un lugar del mundo considerado como de los más bellos también es una tierra llena de magia, misterio y encanto, todo a su alrededor es imponente y la sensación de que en sus aguas y selvas existe una puerta que conduce a otros universos es latente y real.

Las jornadas de trabajo en el Amazonas jamás han sido cómodas, generalmente se revisten de mucho esfuerzo y sacrificio, hombres y mujeres después de largas horas en medio de fuertes temperaturas y acecho de animales salvajes sienten como sus cuerpos reclaman un descanso y unos momentos de esparcimiento que aminoren el cansancio y distraigan la mente mientras se le da alegría al espíritu.

En las riberas del Amazonas y de sus ríos tributarios se organizaban pequeños lugares a manera de estancos o cantinas que eran elaborados con tablones de las ricas maderas de la zona, allí al calor de unos aguardientes, caipiriñas y chichas y al son de música alegre y bullosa se entregaban a la diversión cada noche decenas de hombres y mujeres buscando desasosiego, aventura e incluso romance, algo que sacudiera sus cabezas en medio de la espesura de la selva y de caudalosas aguas.

Bufeo Colorado - Amazonas

Delfín Rosado - Shutterstock

Cuentan que de un momento a otro comenzaron a desaparecer varias mujeres que frecuentaban las noches de juerga en las fondas ribereñas, muchos hombres preguntaban por ellas sin obtener respuestas favorables y coincidencialmente algunos forasteros habían sido vistos visitando esos estancos de perdición, la descripción que de ellos hacían en el lugar era la misma: hombres altos, blancos, bien parecidos y vestidos de traje y sombrero, sin duda que debían tener responsabilidad en dichas desapariciones.

Dicen que estos hombres gustaban frecuentar estos lugares de fiesta y allí beber y gozar de la música, luego se fijaban en las mujeres más bonitas del lugar para con una plática agradable convencerlas de salir a conversar cerca del río, algunos veían a estos hombres y mujeres departiendo en medio de risas en las orillas para luego no volver a saber nada de las mujeres.

Preocupados por esta situación varios hombres decidieron acudir a una de las fondas y al ver a los forasteros asistir al lugar decidieron emborracharlos con chicha y demás bebidas fermentadas de la región y no perderles la pista, de repente y en medio de la borrachera, los hombres salieron del lugar dirigiéndose al río, allí sus cinturones se convirtieron en serpientes boas, sus pies en cuchas, peces del río y al caerse sus sombreros se apreciaban rayas, luego entraban rápidamente a las aguas y desaparecían en medio de la sorpresa de todos.

Río - Amazonas

Río Amazonas - Shutterstock

Estos hombres extraños fueron los culpables de la desaparición de las mujeres, pues las enamoraban y luego las introducían en el río y se las llevaban a lugares desconocidos, dicen que algunos de esos hombres tienen la mitad de su cuerpo como un bufeo, esos delfines rosados que surcan el Amazonas escondiéndose de las embarcaciones que lo remontan.

Cuentan que los bufeos son esquivos y difícilmente se dejan apreciar, algunas veces se escuchan chillidos, aseguran que son los mismos bufeos haciendo burlas luego de haber capturado a una linda muchacha.

Por eso en el Amazonas la aparición de un bufeo causa inquietud, quizás ronda a una hermosa mujer o simplemente ya se llevó a una a un lugar del que jamás regresará.