Colombiano Rendón llega a Santiago convencido de sacar provecho de la soledad

"Soy mejor que mí mismo hace cuatro años cuando gané los Sudamericanos de Medellín; tengo más madurez y me he entrenado bien, con la meta de ganar el oro", aseguró hoy a Efe el peleador, de 33 años.

Rendón es una especie de ermitaño de la delegación colombiana en Santiago; se entrena solo desde hace años en Manizales, en la cordillera central de Los Andes, a unos 300 kilómetros de Bogotá y con su sistema sin entrenador ya fue campeón en unos Juegos Mundiales (Cali 2013), los Panamericanos de Guadalajara 2011 y los Odesur (Medellín 2010).

En sus años de formación trabajó con el técnico Barlagán Pizarro, pero luego el estratega se fue de Manizales y el peleador decidió seguir solo. "Aprendí metodologías de algunos de los mejores preparadores del mundo, decidí tomar las riendas de mi propia carrera y me han salido bien las cosas", dice.

En el 2010 el colombiano se impuso en la final de los Odesur al chileno Miguel Soffia, a quien se encontrará el domingo en el concurso de su división en el cual estarán otros rivales de alta categoría como el brasileño Douglas Brose.

"Será una competencia dura, pero estoy en buena forma y me visualizó como campeón", asegura el arquitecto Rendón, cabeza de la selección de kárate de Colombia, en la cual aparecen otros dos monarcas de los Juegos Mundiales, Guillermo Ramírez, de los 67 kilos, y Lina Gómez, de los 61.

Aunque trabaja por su cuenta, el karateca recibe apoyo de las autoridades, lo cual le ha permitido concentrarse en sus entrenamientos. "Soy un privilegiado, gracias a lo que me ayudan, fui campeón mundial, gané títulos panamericanos y sudamericanos", señala.

Su historia en el deporte no tuvo que ver con películas de artes marciales como sucede con varios de sus compañeros de equipo y rivales, sino con que a los seis años era vecino de un gimnasio de kárate y quedó hechizado por la magia de su deporte.

"Jamás vi películas de Bruce Lee ni de nadie, mi historia es distinta", asegura Rendón, que este año estuvo bajo de forma en los Juegos Bolivarianos de Lima, pero desde entonces recompuso el camino y el domingo combatirá en buena forma deportiva, la que ha logrado con la sencilla estrategia de persistir en su soledad. EFE