¿Quién heredará el trono de Armstrong?

(dpa) La pregunta ronda desde hace tiempo, y tiene razón de ser desde la tarde del domingo en París: ¿Quién heredará el trono de Lance Amrstrong como "rey" del ciclismo?. El debate animó el Tour, una carrera que desde hace siete años carecía de emoción por la "dictadura" de Armstrong, campeón en siete ediciones consecutivas.

Muchos ciclistas quieren aprovechar que en 2006 ya no estará Armstrong, retirado tras una serie de triunfos sin igual. Pero más allá de sus esperanzas, el propio Armstrong dio ya una respuesta al interrogante: su "heredero" es el italiano Ivan Basso.

"Ivan es una persona y un rival muy especial, es mi amigo y es el futuro del Tour", dijo tras alabar también a su eterno rival, el alemán Jan Ullrich.

Pero a Ullrich, a punto de cumplir 32 años, parece que la retirada de Armstrong le llega demasiado tarde como para repetir el triunfo de 1997, cuando a sus 23 años todos lo veían como el co-protagonista de un duelo con el estadounidense.

"Ullrich es capaz de ganar aún varios Tours. Debe convencerse, lo tiene todo para ganar", dijo del alemán, cinco veces segundo, una vez tercero (2005) y otra vez cuarto.

Pero las debilidades en la montaña del líder de T-Mobile hacen que sea complicado que gane de nuevo el exigente Tour, con las subidas más duras que nunca.

"Un poco menos de peso y un poco más de condición física, y podría haber ganado de nuevo. Siempre perdió el Tour los 10 primeros días de carrera", analizó Armstrong a Ullrich.

Precisamente en la montaña vio Armstrong cómo dos jóvenes valores fueron capaces de seguirlo e incluso batirlo. El español Alejandro Valverde (Illes Balears) lo venció en Courchevel, y desde su país ya se lo contempla como un "hombre Tour".

"Creo que hemos visto al futuro del ciclismo", dijo Armstrong tras ser batido por Valverde, que ya ha sido tercero de la Vuelta a España a sus 25 años.

Pero, sin duda, Basso es el más fuerte tras la retirada de Armstrong.

Atacó al estadounidense, marcó los ritmos de ascensiones más fuertes y su mejora en la contrarreloj es más que evidente. Ya ganó la más importante del Giro d'Italia, donde sólo una gastroenteritis en una etapa le impidió luchar por la victoria. En el Tour 2004 fue tercero, y ahora, segundo.

Valverde tiene que mejorar aún contra el crono. En la primera etapa del Tour, en el que debutó este año, cedió sobre 19 kilómetros 2:24 minutos sobre el ganador y más de un minuto sobre sus rivales por el Tour, Ullrich y Basso.

Además, el abandono por problemas en una rodilla deja aún en duda qué puede hacer en tres exigentes semanas.

La lógica dice, por lo tanto, que Basso debería ganar en 2006. El patrocinador CSC, una firma de tecnoclogía de información estadounidense, también cree en su potencial, y hace pocos días renovó su contrato hasta 2008, al lado del director que le descubrió, el danés Bjarne Riis, campeón del Tour en 1996.

Pero el abanico de sucesores no acaba con el italiano. El kazako Alexander Vinokourov quizás sea el que más se parezca a Armstrong por carácter, aunque sus condiciones están un peldaño por debajo de las de Basso y Ullrich. En 2003 fue tercero y este año, quinto. Va bien contrarreloj y en montaña, pero en ninguna disciplina es un especialista.

El añó próximo abandonará T-Mobile, porque quiere un equipo que esté centrado en él al cien por ciento. En el conjunto alemán, con Ullrich y Andreas Kloeden, no es posible. Su capacidad combativa será bienvenida para el espectáculo, y quien quiera ganar el Tour tendrá que soportar sus continuos ataques.

Discovery Channel, ahora sin Armstrong, deberá empezar una nueva era y buscar al sustituto del estadounidnese en su propio equipo una vez fracasados los intentos de contratar a Basso.

Aún interesa Vinokourov, aunque parece estar más cerca de Liberty Seguros, pero el exitoso técnico Johan Bruyneel podría dar la alternativa al ucraniano Jaroslav Popovich, maillot blanco al mejor joven del Tour. Este año ya ganó la Volta a Catalunya y en 2004 fue cuarto en el Giro d'Italia. Asciende, es bueno en contrarreloj y sólo tiene 25 años.

Más atrás está el italiano Damiano Cunego, campeón del Giro en 2004, pero que fracasó en 2005 y cuyo rendimiento aún es una incógnita.

Dentro de un año, la pregunta tendrá respuesta. Armstrong tendrá sucesor en el trono, y el nuevo interrogante será si comienza una nueva era.

Por: Siegfried Mortkowitz (dpa)