Con la reelección de Santos se abre una puerta a las víctimas

Cuando Colombia se enteró que el mandato del 2014–2018 sería de Juan Manuel Santos, se dio un camino más amplio para los diálogos de paz, los cuales llevan de la mano a las víctimas y que con la reelección de Santos, se tiene un gran reto para que 50 años de conflicto lleguen a su fin en Colombia.

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Cuando Colombia se enteró que el mandato del 2014–2018 sería de Juan Manuel Santos, se dio un camino más amplio para los diálogos de paz, los cuales llevan de la mano a las víctimas y que con la reelección de Santos, se tiene un gran reto para que 50 años de conflicto lleguen a su fin en Colombia.

En su campaña el Presidente Juan Manuel Santos le apostó a un reto inmenso y difícil de conquistar en la historia del país. El 15 de Junio,  tras su victoria con 7’816.986 votos, el Presidente Santos ratificó los fines de los diálogos de paz, los cuales conllevarán reformas que tendrá que hacer el Legislativo y el mismo Ejecutivo para permitir que lo acordado se haga realidad.

Colombia espera un mandato de derechos de igualdad en la salud, educación y seguridad, y para que el mandato de Juan Manuel Santos convierta en realidad todo lo anterior, confía en que su bandera será el resultado positivo de los diálogos de paz.

¿Qué esperan las víctimas del conflicto?

En los diálogos de paz que impulsa Santos, se trabajan puntos de gran importancia para las víctimas, pues los 50 años de guerra han desbarajustado la salud, la educación y en especial a la familia colombiana, que muchas veces ha tenido que dejar su vivienda o hasta vivir la tragedia de perder hijos.

Las victimas están a la espera de una reparación, la devolución de sus tierras, las disculpas de los grupos armados, las buenas condiciones del trabajo en el campo; esperan que sus voces sean escuchadas en la Habana y que ponga en tela de juicio la situación de los derechos humanos en Colombia.

Luego de ganar la reelección, el Presidente Juan Manuel Santos, dio a conocer todos sus proyectos para el segundo mandato, invitó a otros partidos políticos de oposición para que sean parte de los diálogos y que con una coalición se puedan dar pasos a lo que el país le apostó con los resultados electorales.

Colombia tendrá sus ojos durante cuatro años más en el mandato del presidente Santos, el cual trascenderá a la historia ya sea por su victoriosa paz o por el fallido proceso. Lo que si queda claro es que Colombia le dio una oportunidad a la paz, pero con el riesgo también de no alcanzarla. Todo está en manos de las intenciones y voluntad política de los negociadores en La Habana.

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