Cómic, rol y anime, protagonistas del Salón del Ocio y Fantasía de Bogotá

Orcos, supermarios, personajes de anime y batman se toman a Bogotá gracias al VI Salón del Ocio y la Fantasía (SOFA) que vive este fin de semana su momento grande con la asistencia masiva de aficionados.

Orcos, supermarios, personajes de anime y batman se toman a Bogotá gracias al VI Salón del Ocio y la Fantasía (SOFA) que vive este fin de semana su momento grande con la asistencia masiva de aficionados.

Y es que Bruce Wayne (Bruno Díaz en algunos países de América Latina) vio la luz por primera vez hace ahora 75 años, cuando fue esbozado por las plumas del dibujante Bob Kane y el guionista Bill Finger, por lo que el SOFA ha decidido rendirle un homenaje con una exposición de obligada visita para los asistentes.

El SOFA, que celebra su sexto aniversario, se ha convertido en un lugar de encuentro para los aficionados a estos géneros que ven que esta convención "sirve para venir como quieras venir y no ser juzgado", según explicó a Efe Diana, una fanática del cómic que acudió disfrazada como Lady Loki, uno de los personajes de la saga Thor.

"Muchas veces cuando te gustan este tipo de cosas (cómics, anime o juegos de rol) la gente tiende a juzgarte y (el SOFA) es un buen espacio para venir y conocer a otro tipo de gente que tiene estos gustos", apostilló.

Precisamente esa libertad se expresa en los "cosplayer", aficionados que se desplazan hasta el Salón disfrazados como personajes de cómic, videojuegos, novelas de ciencia ficción o de fantasía.

Por todo ello, el SOFA se ha convertido en un "pulmón cultural en la ciudad que está habilitado para la diversidad, para que la gente llegue y se encuentre tranquilamente", según lo definió a Efe Constanza Peña, una de sus organizadoras.

Peña subrayó que la convención tiene también el objetivo de "apoyar a industrias creativas y consolidar la creatividad" por lo que año tras año ha ido "convocando a gente con diferentes hobbies" lo que ha favorecido que la convención vaya mucho más allá del cómic y cada vez aúne más actividades.

Entre las que se pueden disfrutar este año destaca el pabellón de artes visuales en el que, además de cómic, puede encontrarse aerografía, un festival de cortometrajes y una exposición de arte contemporáneo que aspira a convertirse en una pequeña alternativa a la gran feria del sector en Bogotá, Artbo, que comienza el próximo 24 de octubre.

La oferta la completan sectores en los que los aficionados pueden disfrutar de los juegos de rol y cartas, un espacio dedicado a la robótica y, sobre todo, un gran pabellón en el que pueden adquirir desde camisetas con los logos de diversos superhéroes a miniaturas o libros.

Uno de los puntos más destacados en el salón, que este año espera acoger a 100.000 visitantes, según los organizadores, es un especial café temático en el que las camareras van elegantemente vestidas con trajes de sirvientas francesas, emulando lo que en oriente, especialmente en Japón, se asocia con un estilo de vida lujoso.

Una de las camareras que trabajan en ese café, Akane, seudónimo nipón que utiliza para ambientarse en el trabajo, comentó que este tipo de restaurante intenta "trasladar algo de este concepto y las costumbres de ellos (los japoneses) a Colombia".

Para conseguirlo no solo tienen una carta típica japonesa sino que decoran la comida, despliegan hechizos sobre ella e intentan ganarse a sus clientes con los trajes grandilocuentes que vienen "de la obsesión que tiene los japoneses por el rococó francés", según explicó Akane.

La estética de este café impregna todo el salón en el que los "otakus", aficionados al anime, son mayoría y recrean la estética clásica de la animación nipona.

Otro de los puntos más frecuentados es la feria medieval que recrea diferentes aspectos de la vida en esos siglos que precedieron a la llegada del Renacimiento.

Con todo ello el SOFA genera un ambiente en el que los fanáticos de estos ambientes de fantasía y juego se sienten en libertad para poder disfrutar de sus aficiones. EFE