COLOMBIANOS EN EL EXTERIOR

Reinaldo Rueda: "Sudamérica produce talentos y Europa los disfruta…"

Reinaldo Rueda, conforma el grupo de directores técnicos, que por primera vez, llevan cabo para la Confederación Sudamericana de Fútbol, un trabajo de análisis técnico del torneo Juventud de América que se disputa en las ciudades de Colonia y Maldonado.

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Reinaldo Rueda, conforma el grupo de directores técnicos, que por primera vez, llevan cabo para la Confederación Sudamericana de Fútbol, un trabajo de análisis técnico del torneo Juventud de América que se disputa en las ciudades de Colonia y Maldonado.

El mismo tendrá su epílogo en la capital uruguaya, Montevideo. Un amplio conocedor, el colombiano, nacido en la cálida Cali, habló con CONMEBOL.com, con sencillez y la sabiduría de los que han recorrido un largo camino en la profesión, que le dio la oportunidad de cumplir el mismo rol en la FIFA.

¿Cómo se dio la posibilidad de hacer esta tarea junto a los Sres. Gerardo Pelusso, Gustavo Ferrín y Jorge Burruchaga?. Siempre existe una primera vez…

En septiembre en el congreso de FIFA, en Panamá, vislumbramos esa posibilidad con el profesor Daniel Bañales, que es de la AUF, Director de Desarrollo Deportivo. Me comentó que presentó esa  propuesta a la selección uruguaya, y posteriormente a la CONMEBOL, para realizar este trabajo e integrar un equipo de apoyo técnico. Por fortuna  se concretó, y después llegó la oficialización de parte de CONMEBOL. Estoy contento por esta distinción, por todo lo que significa este torneo para Sudamérica, y bueno en caso mío que hago parte de FIFA como instructor. Se puede calificar como histórica. Es muy reconfortante. Sudamérica ha dado un paso hacia el futuro. Se llenó un vacío.

¿En la FIFA, también hizo un trabajo similar?

Lo hemos hecho  en el Mundial Sub-17 en el año 2007, de Canadá.  Es lo que normalmente  la FIFA desarrolla, con diferentes tipos de estudios técnicos, dependiendo de la disponibilidad de los instructores, de la categoría del torneo. La  FIFA designa o postula instructores para integrar el grupo técnico dependiendo de la magnitud del torneo, de la cantidad de sedes.

¿Cómo puede calificar lo que vio hasta ahora del Juventud de América?

Es un torneo atractivo desde todo punto de vista por la gran riqueza que tiene Sudamérica. Los talentos  sobresalen, y a medida que el torneo avanza las selecciones que tienen una mejor infraestructura y que han invertido en esta categoría, empiezan a consolidarse, tienden a sobresalir.

¿Se puede tomar como ejemplo Colombia, el momento de su presente e inclusive exportando directores técnicos?

Es el premio y la recompensa a todo el fútbol colombiano, de muchos años. Colombia siempre ha invertido en el fútbol infantil, juvenil. Nosotros como entrenadores hicimos un proceso, recorrimos el país, capacitando entrenadores, reclutando talentos de Sub-14, el BabyFutbol que lleva muchos años.  Y después todas las categorías de fútbol amateur. Creo que todo lo que se ha logrado invirtiendo en las categorías Sub-15, Sub-17, Sub-20 se ve reflejado ahora en la categoría absoluta, con una generación de buenos conceptos, con una selección que se posicionó hace varios años en Europa. El fútbol colombiano cada vez debe exigirse más, ya tenemos una generación que se fue, no podemos dormirnos en los laureles.  Este presente nos exige seguir trabajando y naturalmente que Colombia tiene todo el potencial para lograrlo.

Si tuviera que mencionar una influencia, ¿que diría usted?

Ha sido un trabajo de todo el fútbol colombiano. Al final el esfuerzo mancomunado que hacen desde el pueblo, de los barrios, de los clubes, de las escuelas de fútbol. El interés de muchos años por hacer una buena formación. Se rompió ese paradigma de inseguridad para brindar oportunidad a un jugador joven, naturalmente que no es todavía lo ideal. Tenemos una superpoblación de delanteros, de jugadores en la parte ofensiva. No ocurre lo mismo con los porteros, o defensores centrales. Esto empezó años atrás, cuando después de esos logros de los Mundiales de USA 90, Francia 98, allí hubo una transición. Ahí comenzamos a reaccionar, pero han sido 15 años lo que demoramos para volver a un Mundial.

Hablando de Mundial, usted tiene una trayectoria importante. ¿Cuál ha sido el más trascendente para usted como profesional?

Hay dos momentos importantes. Los dos mundiales sub-20 que viví con Colombia, el de Australia en el 93, y después el de Emiratos Árabes en el 2003; fueron momentos muy gratos. Clasificamos después de 10 años a Colombia, acá mismo en Uruguay, en calidad de visita. Vivir ese momento y  conseguir el 3er lugar, una posición que no lo habíamos conseguido nunca. Se desarrolló un proceso espectacular, con mística, gracias al respaldo de la Federación Colombiana de Fútbol. Y luego me tocó ir con Honduras, con un escepticismo grande, una incredulidad por parte de la directiva, en los entrenadores que habían intentado ese proceso, nosotros que llegábamos como extranjeros. Sumamos a la causa jugadores que pusieron mucho de sí y se comprometieron. Fue una conexión con la afición, que apoyaba en cada juego, y llevó a la unificación de ese país que sufría las consecuencias de un conflicto desgastador. La selección unió al país. Las generaciones que nunca habían visto jugar a la selección en un mundial tuvieron una motivación extraordinaria. Fue un momento importante para mí.

¿Se puede calificar como un entrenador exitoso?

Me puedo considerar un bendecido por Dios. Son 4 mundiales, con Honduras, Colombia y Ecuador, cumpliendo las metas. Es una satisfacción con las personas que integraron el cuerpo técnico, para los directivos, para nuestras familias.

Esta tarea puntual, de recabar datos técnicos del “Juventud de América”, Uruguay 2015, será el primer material didáctico  para el fútbol del continente, un avance hacia el futuro.

El informe queda para la historia, para cuando alguien quiera revisar el material. Ahora en el futuro inmediato, va a ser importantísimo, una herramienta de estudio para todos los entrenadores que trabajan en la Sub-15, Sub-17. Cuáles son las debilidades. Cuáles son las bondades. Si hay que mejorar el juego aéreo, etc. Las innovaciones desde el punto de vista médico. Todo queda registrado en el informe. Significará un mejor trabajo en la formación de jugadores. Queda como un material matemático estadístico, táctico, eso es lo que le va quedar al fútbol sudamericano.

De lo que vio hasta en este torneo. ¿Qué puede rescatar?

Está en sus inicios. Hemos visto en forma indirecta lo de Colonia con un grupo muy regular, que han tenido partidos interesantes pero que todavía no está la gran selección, quizá Paraguay que ha ganado sus dos partidos. En Maldonado, Uruguay que se fortaleció con su victoria ante Brasil, muy ordenado, eficiente, aprovechando la gran bondad que tienen en el fútbol aéreo, a Colombia le gana, a Brasil también. Los uruguayos atacan con mucha agresividad. Hasta el momento Paraguay en el Grupo A y Uruguay en el Grupo B.

Usted mencionó a Uruguay. ¿A qué se puede atribuir eso, siendo un país de no tan elevada densidad poblacional?

Todo el mundo del fútbol, sabe lo que es el fútbol uruguayo. Acabamos de ver a Uruguay finalista en la Copa del Mundo en Turquía. La versión anterior contra Francia. Es extraordinario con la  cantidad de su población, es increíble que exporte tantos jugadores. Son profesionales, de gran talla, hombres que cuando usted los enfrenta a nivel de clubes, son profesionales íntegros, con vocación y respeto. Paraguay no tiene la superpoblación que tiene Brasil, que tiene Argentina, pero está ahí. Entiendo que es generacional. A veces es problema de organización. Lo que vivimos en Colombia muchos años. Se excede en confiar mucho en el talento natural y se descuida la organización, la competencia, la capacitación. El proceso de selección de jugadores, es un problema porque se involucran otros factores que dañan la conformación de la selección nacional. Se quedan muchos jugadores afuera, por intereses particulares. Son escollos reales.

Usted habló de la capacitación del DT Sudamericano. ¿Cuál es su calificación?

Para mí son de excelente calidad. Muchas veces carecemos de los medios necesarios. El respeto, el estatus, a veces es responsabilidad nuestra que no lo hemos sabido ganar. He podido observar en Europa,  la distinción de ser un seleccionador nacional, la distinción de ser un mister, un coach, de algunos de estos clubes, de una selección nacional. En Sudamérica todavía no nos ganamos esa distinción.

¿Hay una autocrítica al respecto?

Indudablemente sí, es algo que siempre comparto en mi función de instructor y de capacitar entrenadores. Tenemos que luchar, considero que con la nueva administración del Sr. Juan Ángel Napout podremos enfocar el objetivo de una Licencia CONMEBOL para técnicos. Europa, con todas las dificultades idiomáticas tiene la homologación de la licencia, la UEFA Pro. Nosotros, con excepción de Brasil que tiene el portugués, debemos tener la Licencia CONMEBOL. Hace mucho tiempo estoy con esa inquietud. Ojalá que ahora la institucionalicen y la exijan por el bien de todos nosotros y el bien de todos los jugadores.

¿Qué le sugiere la presencia de tantos observadores europeos en este torneo?

Lo hemos visto en los juegos, son muchos. Creo que eso es lo que se ha ganado Sudamérica. El caso de Messi, de Suárez, de James Rodríguez. Los chilenos, Vidal, Alexis Sánchez. Los peruanos, Farfán, Guerrero, Pizarro. Los brasileños en un gran porcentaje. Cada país tiene su figura. Muchas de ellas se ganaron ese lugar en un torneo sub-20. Entiendo que Europa se nutre de  Sudamérica. Aquí hay el talento natural. Los europeos nutren sus clubes, logran adquirir esos talentos y luego ya vienen las transacciones que genera mucho dinero. Es una empresa, nosotros producimos un elemento vital y Europa lo disfruta. Lo llevan cada vez a más temprana edad y esa es la razón de la presencia de tantos observadores. La contraparte es que esa situación genera dinero y bienestar para muchos. Con información Conmebol.com.