Una sanción de otra década para Simeone

Los ocho partidos de suspensión para el DT argentino del Atlético de Madrid, recuperan sanciones de otra década para un técnico, como los nueve encuentros con los que fue castigado Txetxu Rojo en el año 2000.

El DT argentino del Atlético de Madrid, Diego Simeone (de espaldas), tras ser expulsado en el partido de vuelta de la Supercopa de España. Foto: EFE
El DT argentino del Atlético de Madrid, Diego Simeone (de espaldas), tras ser expulsado en el partido de vuelta de la Supercopa de España. Foto: EFE

Los ocho partidos de suspensión para el DT argentino del Atlético de Madrid, recuperan sanciones de otra década para un técnico, como los nueve encuentros con los que fue castigado Txetxu Rojo en el año 2000.

Los ocho partidos de suspensión que ha impuesto este lunes el Juez de Competición de la Federación Española de Fútbol al argentino Diego Simeone, entrenador del Atlético de Madrid, recuperan sanciones de otra década para un técnico, como los nueve encuentros con los que fue castigado Txetxu Rojo en el año 2000. (informe)

Esa suspensión, que data del 22 de junio del año 2000, es una de las últimas referencias en ese sentido por la cuantía de choques para un entrenador en el fútbol español, tras su expulsión por doble amonestación en el partido de la jornada 38 de la campaña 1999-2000 ante el Valencia en Mestalla, jugado el 19 de mayo de 2000.

Rojo, que cumpliría después esa sanción como técnico del Athletic Club de Bilbao en las primeras nueve jornadas del curso siguiente, se enfrentó después en el túnel de vestuarios al árbitro Medina Cantalejo, que recogió en el acta que le había insultado gravemente.

Competición dividió entonces su castigo en dos apartados, por un lado un encuentro por doble amonestación y por otro ocho en aplicación de los puntos b, c y d del artículo 122, por los cuales el entrenador había insultado, amenazado y zarandeado al árbitro. También le impusieron una multa de 600.000 pesetas (3.600 euros).

Las más recientes nunca fueron tan duras como la recibida por Simeone. El año pasado, las sanciones a primeros técnicos de la máxima categoría no pasaron de los cuatro partidos, el número de encuentros de suspensión con el que fue castigado el pasado 8 de enero el mexicano Javier Aguirre, por aquel entonces preparador del Espanyol, por su expulsión frente a Osasuna.

"En el minuto 63 Javier Aguirre fue expulsado por el siguiente motivo: dirigirse a mí, de pie en su área técnica a voz en grito, en los siguientes términos: 'Eso es amarilla hijo de puta'", escribió entonces el árbitro Ignacio Iglesias Villanueva. Competición, días más tarde, le impuso esos cuatro partidos fuera del banquillo.

Con uno menos fue sancionado el alemán Bernd Schuster, técnico del Málaga el pasado curso, en una acción con alguna similitud con las infracciones cometidas porSimeone en la pasada Supercopa de España.

En la última jornada de la pasada campaña, Schuster fue expulsado en el Málaga-Levante por "protestar de forma ostensible y reiterada" una decisión arbitral, saliendo "de su área técnica, y simultáneamente empujar levemente, en señal de desconsideración, al cuarto árbitro, cuando éste se dirigió a él para que cesara su actitud".

"Una vez expulsado y habiendo abandonado el banquillo, se situó en la entrada de los accesos a vestuarios. El cuarto árbitro dándose cuenta de este hecho informó al delegado de campo en los minutos 74 y 80 para que el entrenador abandonase dicha zona, haciendo el entrenador caso omiso a dichas indicaciones que el delegado de campo le transmitió", añadió en el acta Eduardo Prieto Iglesias, árbitro de ese encuentro, disputado el pasado 16 de mayo.

Competición impuso los mismos encuentros, tres, el pasado 5 de marzo al argentino Germán 'Mono' Burgos, segundo técnico del Atlético, por su expulsión frente al Real Madrid por "protestar a voces y con los brazos en alto de forma ostensible y reiterada" una decisión del árbitro, según el acta de aquel derbi.

"Una vez expulsado, persistió en sus protestas encarándose conmigo y teniendo que ser sujetado por varios integrantes del cuerpo técnico y jugadores de su club ante la actitud agresiva que mostraba hacia mi persona", añadió Carlos Delgado Ferreiro, el árbitro de aquel choque, que terminó con empate a dos goles.

Antes, José Mourinho protagonizó algunas de las sanciones más sonoras desde el punto de vista mediático, como los dos partidos por meterle un dedo en el ojo a Tito Vilanova en la Supercopa de 2012 entre el Real Madrid y el Barcelona. El mismo número de encuentros significaron otras dos expulsiones en la Copa del Rey.

La UEFA le sancionó con más fuerza el 6 de mayo de 2011: cinco partidos, el quinto "en suspenso por un periodo de prueba de tres años". Esa fue la resolución del Comité de Control y Disciplina, además de una multa de 50.000 euros, por su expulsión y sus declaraciones críticas hacia los árbitros tras el duelo de ida en las semifinales de la Liga de Campeones contra el Barcelona (0-2), jugado el 27 de abril de 2011 en el estadio Santiago Bernabéu.

Un año antes, Pep Guardiola, por entonces entrenador del Barcelona y ahora en el Bayern Múnich, debió pagar una multa de 15.000 euros que le impuso el Comité de Competición por unas declaraciones en las que aseguró que el árbitro Clos Gómez mentía en el acta arbitral del duelo entre el equipo azulgrana y el Almería.

En Segunda División, en septiembre de 2012, Carlos Pouso, entonces técnico del Mirandés, fue sancionado con seis partidos, tras protestar una decisión del colegiado en un partido de Copa del Rey contra el Recreativo de Huelva "golpeándose con su palma de la mano en la cara en repetidas ocasiones y entrando en el terreno de juego" y, tras ser expulsado, agarrar al cuarto árbitro de la camiseta diciéndole "eres un chivato".

En otro tipo de sanciones a técnicos de Primera División destaca los cuatro meses en los años 2000 a Roberto Olabe y Jesús María Zamora, por entonces en la Real Sociedad, aunque por diferente motivo a los anteriores: el Comité de Competición consideró que el primero de ellos ejerció de entrenador con el título del segundo.

También está entre las más altas la que recibió Enrique Martín, técnico del Leganés, en noviembre de 1999: diez encuentros de suspensión por interceptar un balón dentro del terreno de juego en un partido de su equipo contra el Badajoz. EFE

Artículos Relacionados

+ Artículos

Lo más leído en Fútbol

Lo más leído en Colombia.com