Taurinos y antitaurinos, siguen en disputas por la fiesta brava

Se movilizan taurinos y antitaurinos sobre el futuro de la fiesta brava, tras el último fallo emitido, se ordenó el regreso de las corridas de toros a la Plaza La Santamaría de Bogotá.

Foto: EFE
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Se movilizan taurinos y antitaurinos sobre el futuro de la fiesta brava, tras el último fallo emitido, se ordenó el regreso de las corridas de toros a la Plaza La Santamaría de Bogotá.

El fallo del tribunal en una acción de tutela (recurso de amparo), revive la tauromaquia en Bogotá, una ciudad que bajo el auspicio del alcalde Gustavo Petro inició el camino de la abolición para que los espacios públicos estén dedicados a "actividades de vida y no de muerte", según dijo en su momento.

Sin embargo la sentencia no ha sorprendido a las asociaciones animalistas, ya que, según explicó a Efe la portavoz para Colombia de Anima Naturalis, Andrea Padilla, el magistrado que tomó la decisión tiene una estrecha "relación con el mundo taurino". Según Padilla, esta sentencia está "a favor de los intereses de los taurinos y contra de la protección de la naturaleza y los animales".

En su opinión, la tauromaquia tiene ahora "sus últimos alientos de vida en todo el mundo" con este tipo de sentencias que son en realidad "ejercicios de poder" impulsados por el cabildeo de los taurinos que, a su juicio, "es muy poderoso". Tras el fallo, Anima Naturalis solicitará al alcalde Petro que reclame "la nulidad de la sentencia", pues considera que "el debate legal está llegando a un fin" tras cuatro años de "batalla jurídica que se pierde en interpretaciones".

Por ello y para evitar que "la abolición no siga en esta permanente incertidumbre", consideran que ha llegado el momento de reactivar la idea de convocar una consulta popular que permita a los bogotanos decidir si quieren que haya toros o no en la ciudad. Padilla, espera que Petro "haga un guiño" al movimiento y de este modo "eche a andar todo el proceso".

En cualquier caso y para concienciar a la población preparan concentraciones y actividades con activistas en las que simularán el ejercicio de la votación para "hacer pedagogía". Por su parte, los taurinos denuncian que con la abolición de los toros podrían desaparecer unos 35.000 empleos además de generar pérdidas a ganaderos, toreros y responsables empresariales de la fiesta brava colombiana.

Alegan además que tras la clausura del museo taurino, que estaba situado en la plaza, se perdieron o dañaron piezas en un acto que algunos miembros del colectivo consideran un "saqueo". Frente a La Santamaría, un grupo de siete novilleros hacen huelga de hambre desde hace 30 días para pedir que la tauromaquia retorne a Bogotá. Uno de los huelguistas, el novillero Diego Alejandro Torres, declaró a Efe que quieren que se escuche sus reclamaciones porque "están violando el derecho a la libre expresión y a la libertad de elegir trabajo".

Tras la resolución de la Corte, otro de los huelguistas, Alfredo Peña, se mostró muy contento porque saben que ha sido "un paso y la ley se está imponiendo a las injusticias", aunque afirmó que continuarán la huelga de hambre porque lo que reclaman es "que se abra la plaza de toros" y vuelvan las novilladas y corridas. Sin embargo y pese a la sentencia, que dicta que la corridas deben volver antes de seis meses, el coso taurino necesita una reforma y, según las previsiones, no estará preparado para su reapertura hasta dentro de dos años.

El alcalde Petro prometió en su cuenta de Twitter que cumplirá la sentencia, pero mientras tanto unos y otros se encontrarán en las calles para reivindicar sus posiciones. EFE