Barrio y Capilla de San Antonio

EL ORIGEN DE LA CIUDAD

Inicialmente se construyó una capilla en el año de 1746 en unos terrenos donados y ubicados en lo que muchos consideraron el lugar de fundación de la ciudad, los primeros habitantes llegaron desde otros lugares del actual departamento del Valle del Cauca y lugares circundantes de la ciudad y con el paso del tiempo, de regiones de los actuales Cauca y Nariño.

Las casas de San Antonio son famosas por su arquitectura y porque cuentan con amplios patios centrales con pisos hechos con piedras de río, tienen dos pisos y zaguán, construcciones tradicionales de España pero pensadas para el clima cálido de estas tierras.

La capilla de San Antonio es una construcción sencilla que evoca las haciendas campesinas de los cañadulzales y que solo deseaba ser una casa de oración pero con el paso del tiempo se convirtió en un símbolo de la ciudad y en un lugar muy visitado por los fieles católicos.

San Antonio es un lugar muy reconocido por haber sido hogar de artistas, escritores y personas ligadas a la bohemia, como es el caso de Andrés Caicedo, Carlos Mayolo o Luis Ospina y ha contado con personajes famosos propios del lugar como “La fiera”, “El burrito de San Francisco” y “El negro Genaro”.

La fe tiene historia en San Antonio debido a que es una arraigada costumbre la celebración de La Semana Santa y son famosas sus procesiones en las que en andas se transportan imágenes por las calles del barrio.

La historia de este barrio de calles empinadas también es dulce, pues es tradicional la elaboración de las macetas, confites de agua y azúcar que se regalan el 29 de junio en el llamado día de los ahijados, una tradición declarada como Patrimonio cultural inmaterial de Colombia.

En San Antonio los augurios tienen cabida a la par con algunas costumbres supersticiosas como la de sembrar cierta clase de hierbas en los patios para evitar hechicerías y estimular la buena suerte, también es muy reconocida la costumbre de lanzar una medalla al tejado de un vecino indeseable para que este se mude de domicilio.

Sucesos paranormales hacen eco en cada conversación, son comunes, según dicen propios y extraños las apariciones de duendes y brujas, también es conocida la historia de que en algunas noches se escucha una estampida de caballos que raudos recorren las calles del barrio pero que nadie logra ver.

San Antonio tiene una vocación cultural y educativa, son comunes las bibliotecas y teatros que en su interior han creado obras que han sido pioneras de la actividad dramatúrgica en el país. También es sede de festivales de todos los géneros musicales entre los que se destaca el Festival de música del Pacífico Petronio Álvarez.

Cali cuenta con un sector lleno de historia y pleno de vida en el barrio San Antonio, un lugar infaltable en la visita que un turista debe realizar en esta ciudad repleta de sorpresas.