Santa Marta

Por: Redacción Turismo • Colombia.com

Taganga, donde la belleza serpentea en el ambiente

Los indígenas llamaron a este lugar el “cerro de las serpientes”, pero en lugar de generar temor,
este lugar es uno de los más bellos destinos escogidos por los amantes de la verdadera belleza
natural.

Taganga, sitio turístico infaltable en tu visita a Santa Marta. Foto: Shutterstock
Taganga, sitio turístico infaltable en tu visita a Santa Marta. Foto: Shutterstock

Los indígenas llamaron a este lugar el “cerro de las serpientes”, pero en lugar de generar temor,
este lugar es uno de los más bellos destinos escogidos por los amantes de la verdadera belleza
natural.

La bahía de Taganga es uno de esos lugares que parecen sacados de un cuento maravilloso, y quienes han respirado su aire y mojado su existencia con sus aguas, saben que el paraíso es un lugar que al parecer está ubicado en la parte norte de Suramérica.

Taganga es una población de aproximadamente 3.000 habitantes, la mayoría de ellos pescadores, hombres y mujeres alegres y valientes, que cada día surcan el mar Caribe con la convicción de una buena faena en un rincón del mundo hermoso y generoso.

En las últimas décadas Taganga se ha convertido en un lugar de especial interés turístico, y un espectáculo digno de admiración es el de los pescadores construyendo con inigualable destreza sus canoas, lo mismo sucede con la manera en que usan la atarraya, el indispensable aparejo que lleva el pan a la mesa y convierte a los nacidos en esta tierra elegida en auténticos expertos del mar, verdaderos herederos de los Tayronas, esa tribu imponente que logró hacer del mar su amigo.

Taganga está ubicada a 15 minutos de una de las famosas playas de Santa Marta, el Rodadero, y se consolida como un oasis del descanso y la contemplación, aunque aquellos más osados disfrutan de su mar para practicar el buceo y toda suerte de actividades acuáticas.

El viaje hacia Taganga está lleno de encanto gracias a su carretera que serpentea mientras descubre la hermosura de su ambiente, allí se entiende su etimología indígena que significa “cerro de serpientes” mientras las faldas de la montaña ofrecen una sublime presentación natural a la que nadie se puede resistir y pone a palpitar los corazones que se extasían con la hermosura.

El mirador de Taganga es una visita de obligado placer, porque divisar desde allí el panorama es una representación del realismo mágico, una función natural con ubicación privilegiada en la mejor fila, y si el asiento se toma a bordo de una lancha con destino a Playa Grande, la función de emoción es doble.

Los amantes del camping tienen la magnífica oportunidad de disfrutar de la naturaleza del departamento de Magdalena en las ensenadas de Concha y Cañaveral, allí los ecohabs armonizan a estadía con el ambiente fomentando su preservación.

Llegar a Taganga es un viaje que se puede hacer desde Santa Marta, desde la capital del Magdalena se pueden abordar buses que viajan directamente hasta uno de los lugares más exóticos y hermosos que se puedan conocer.