Las cinco diferentes madres que existen en el mundo

No existe un manual que nos diga como demos criar a nuestros hijos, pero la forma de crianza ha venido pasando de generación en generación. Lo que ubica las diferencias de las madres, para que las comprendamos durante el largo camino de ser mamá.

Las perfeccionistas: Son las mamas que quieren que sus hijos sean perfectos, que no esperan ni buscan el fracaso. Es por esto que siempre presionan a los niños, los cuales en su mayoría no se sienten en la misma altura que ellas. Lo que causa problemas sicológicos durante la infancia.

La competitiva: Este tipo de madres son las que siempre están envidiando a sus hijas, por la juventud y la belleza con la que cuentan. Por este caso la relación de madre e hija se termina deteriorando; las mujeres que están dentro de este comportamiento deben asumir que sus emociones son negativas y que debe cambiarlas para no afectar su ambiente familiar.

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La Madre GPS: es la típica controladora, es obsesiva del control y es sobre protectora. Este tipo de actitudes se deben a que desean demostrarle su cariño a su hijo pero lo llevan al extremo, lo que hace que la relación se desgaste y la confianza se pierda.

La que trata de apropiarse de todo lo que le está pasando al niño: Este tipo de madres son las que piensan que sus hijos son una extensión de ellas y que ellos van a realizar lo que no pudieron por las diferentes situaciones en las que vivieron. Es inevitable que los hijos sufran y estén en contantes peleas por defender su espacio.

Por último, está la cómplice: La madre que cree que su hijo es un amigo y que la posición de autoridad no existe. Ella debe entender que su posición es ser el ejemplo de su hijo y que por ello debe dejar claro que por más que exista la confianza no se pueden pasar ciertos comportamientos. 

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