Argentina superó 3-1 a España, está en semifinales y la mandó a casa

Bajo la batuta de Lionel Messi, el pequeño gigante, y con dos goles como puñaladas en minuto y medio, Argentina liquidó a España por 3-1 y clasificó a las semifinales del Mundial Juvenil donde se medirá nada menos que con Brasil.

Una genialidad de Messi, que aprovechó una vacilación de la defensa española para anotar su tercer gol en el certamen, les dio a los argentinos el pasaporte. Menos de dos minutos antes Gustavo Oberman había desempatado el partido con otro gol de vértigo.

El capitán argentino Pablo Zabaleta abrió el marcador y Zapatero empató en un primer tiempo de méritos parejos. En la segunda etapa Argentina no perdonó errores para pegar donde más dolía.

Argentina y Brasil protagonizarán la semifinal sudamericana en Utrecht el martes, y el mismo día en Kerkrade disputarán el otro duelo Marruecos con Nigeria. África y Sudamérica se repartirán los honores ante la ausencia de los europeos.

Messi, candidato firme al Balón de Oro que premiará al mejor del torneo, también introdujo la pelota en la red rival con un tiro libre, pero el árbitro anuló la jugada por posición adelantada de un compañero que estaba justo frente al arquero hispano.

La primera etapa se dividió en dos mitades: la primera vio a una Argentina dominadora que quería llevarse por delante a su rival, y la segunda a una España que devolvió atenciones cuando salieron a relucir sus individualidades.

A los 8 minutos Lionel Messi cobró un tiro libre desde la derecha que el arquero español Biel Ribas no atinó a contener y la pelota entró en el arco, pero el árbitro mexicano Benito Archundia anuló la jugada por posición adelantada de Julio Barroso, que estaba encimando al vacilante Ribas.

El mayor despliegue argentino dio dividendos a los 19 minutos cuando Neri Cardozo sirvió un centro de tiro libre como con la mano a Zabaleta, que solo frente a Ribas la tocó con la zurda a un costado para abrir el marcador.

Al promediar la etapa, el técnico argentino Francisco Ferraro reclamaba: "¡Dénsela en diagonal a Cardozo!" y después "Hoy es overol, viejo", como reclamando trabajo y sacrificio.

España emparejó las acciones y empezó a llevar cada vez más peligro al arco argentino.

Fue así como a los 32', Molinero por la derecha se la entregó a Llorente dentro del área, el grandote de espaldas al arco se la tocó corta a Zapatero, que entraba a la carrera, y éste empató con un remate poderoso y cruzado a la derecha de Oscar Ustari.

Sobre los 40 minutos Messi recibió, se la llevó entre Robusté y José Enrique y cuando le salía el arquero remató débil y a un costado y la pelota salió lamiendo la base del segundo palo.

Argentina sustituyó en la segunda etapa a Pablo Vitti por Gustavo Oberman y, entre los 71 y 73 minutos, se desató el aluvión argentino.

Primero fue Oberman quien recibió un pase en profundidad y entrando por la derecha la tocó cuando le salía el arquero y anotó el segundo.

Y dos minutos después, Oberman lanzó centro a Messi, Molinero quiso rechazar y el diminuto volante entró entre dos marcadores y volvió a vencer el arco español con remate a un costado.
Con Ap.