Ministro de salud de Ecuador decidió primero vacunar contra la COVID-19 a su familia

Gran revuelo ha causado en Ecuador la vacunación contra la COVID-19 con las primeras dosis del laboratorio Pfizer llegadas al país y el ministro de Salud ha protagonizado un escándalo debido a que se dio a conocer información según la cual el funcionario permitió que algunos miembros de su familia fuesen vacunados con las primeras dosis del biológico.

Ecuador inició su plan de vacunación este fin de semana con 8.000 dosis llegadas desde los laboratorios de Pfizer y en la primera etapa de este se espera inocular a algunos miembros del equipo den trabajadores de la salud en primera línea, ancianos de centros geriátricos y sus cuidadores.

La Asamblea Nacional exigió a Lenín Moreno, presidente de la nación, a que destituya de su cargo al ministro de Salud, Juan Carlos Zeballos por el manejo de la vacunación contra la COVID-19, que adquirió tintes escandalosos con la noticia de que la familia del ministro hizo parte de las primeras dosis suministradas en el país.

Con 121 votos a favor y 4 en contra, la Asamblea Nacional aprobó un proyecto de resolución para buscar la salida del ministro de Salud de su cartera por su controvertida actuación que ha desatado el descontento entre la población por este hecho que indigna a la nación.

Ecuador ya tiene preparado el arribo de 86.000 dosis en el mes de febrero, pero ahora la pregunta que se hacen las autoridades es si usarán las dosis para 86.000, o las usarán para 43.000 personas y sus respectivas dos dosis.

La polémica con el ministro Zeballos estalló cuando la vacunación se realizó en un exclusivo centro geriátrico de la ciudad de Quito en donde habían varios familiares del funcionario, aunque también se especula con que permitió la vacunación para diferentes amigos, pero el jefe de la cartera de la salud ecuatoriana solo se atrevió a afirmar que allí efectivamente sí se encontraban algunos miembros de su familia y los medios constataron que en el geriátrico privado y destinado para gente de elevados ingresos se encontraba su mamá.

El suceso pasó a mayores, teniendo en cuenta que las dosis de las vacunas que arribaron al exclusivo centro para adultos mayores estaban destinadas a un hospital público, acrecentando la polémica y lo que consideraron un caso de corrupción, clasismo e irresponsabilidad.

El pueblo ecuatoriano está pidiendo que rueden cabezas por este hecho y se espera que la Asamblea Nacional pueda lograrlo.