Lula será candidato a la Presidencia de Brasil, si Rousseff desiste
El expresidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva afirmó en una entrevista a un programa de televisión que será candidato a la Presidencia en 2014 en caso que Dilma Rousseff, desiste.

El expresidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva afirmó en una entrevista a un programa de televisión que será candidato a la Presidencia en 2014 en caso que Dilma Rousseff, desiste.
"La única hipótesis para
que yo vuelva (a disputar la presidencia) es si ella no quiere (buscar
la reelección). Sólo seré candidato si ella no lo quiere", dijo Lula al
ser preguntado sobre un posible tercer mandato en una entrevista
transmitida anoche por la red de televisión SBT y reproducida hoy en
varios diarios.
"No voy a permitir que un tucano (el
calificativo para los miembros del opositor Partido de la Social
Democracia Brasileña) vuelva a la presidencia de Brasil", dijo.
El
expresidente, en su primera entrevista desde que los médicos lo
consideraron curado del cáncer en la laringe que le fue diagnosticado el
año pasado, admitió que esa posibilidad está distante debido a que, en
su opinión, Rousseff, con una popularidad tan alta como la suya, tiene
todas las condiciones para ser reelegida.
"La presidenta
Dilma Rousseff va a estar muy fuerte al final de su mandato", agregó el
mandatario, que es considerado como el artífice de la elección de su
sucesora.
Lula reiteró que, tras superar la enfermedad, se
dedicará desde ahora a promover las candidaturas de los integrantes del
Partido de los Trabajadores (PT) a las elecciones municipales de octubre
próximo.
Lula acudió a la entrevista acompañado por su
exministro de Educación y candidato del PT a la alcaldía de Sao Paulo,
Fernando Haddad, y dejó claro que su intención al participar en el
programa era promover la aspiración política del correligionario.
El
expresidente considera que, así como convirtió a Rousseff de una
ministra poco conocida y sin proyección política en su sucesora como
jefe de Estado, puede transformar a Haddad en el alcalde de la mayor
ciudad brasileña, un cargo desde hace años en manos de opositores.
Sobre
el cáncer, que superó con quimio y radioterapia, aseguró que la única
dificultad que aún tiene es para ingerir los alimentos.
"La
garganta sigue inflamada. Me duele cuando tomo agua, me duele cuando
paso saliva, me duele cuando como carne, me duele cuando como pan",
afirmó.
"El tratamiento no es un juego. Es bastante duro. Hay
que tener dedicación y disciplina para cumplir las reglas de los
médicos", afirmó.
Agregó que actualmente se somete a sesiones
de fisioterapia y de fortalecimiento de los músculos debido a que, por
las secuelas del tratamiento, ya sufrió dos graves caídas.
Lula
evitó pronunciarse sobre la actual polémica de la que es protagonista
después de que un ministro del Supremo Tribunal Federal (STF) lo acusara
de ejercer presiones para postergar el juicio por un escándalo de
corrupción que hizo tambalear su gobierno en 2005.
La
audiencia final del juicio está prevista para el segundo semestre de
este año y los oficialistas luchan por aplazarla para que no afecte a
las aspiraciones del PT en las elecciones municipales.
"No
tengo interés en hablar sobre eso. Ya divulgué un comunicado al
respecto. Quien inventó esa historia que la pruebe. El tiempo se
encargará de aclarar las cosas", afirmó.
EFE