Derrumbes en el municipio de Guayabetal mantienen en emergencia a sus habitantes

No ha iniciado el invierno oficialmente, pero ha caído agua como la del diluvio bíblico, razón que tiene a los habitantes de la población de Guayabetal, en el departamento de Cundinamarca, con el lodo al cuello debido a los deslizamientos de tierra que han ocasionado el colapso de varias viviendas y mantienen en riesgo a varias más.

La vía al llano, quizás el canal terrestre de comunicación con más problemas en Colombia debido a la zona geográfica en que se encuentra, a su clima y también a la corrupción que jamás ha permitido entregarle al país una vía sin inconvenientes para los viajeros y transportadores, tiene a lado y lado diferentes poblaciones que debido a su ubicación dependen de la propia vía para comercializar sus productos y también del turismo.

El invierno no solo atenta contra el bienestar de transportadores, viajeros y todos los productos agrícolas que abastecen al centro del país, también perjudica a poblaciones como Guayabetal, que debido a las fuertes lluvias y a la creciente del río Negro atraviesa difíciles momentos.

Guayabetal se encuentra incomunicado y la vía al llano se encuentra cerrada debido a las labores de limpieza y remoción de escombros en los kilómetros 25, 44 y 58, por lo que centenares de viajeros se encuentran esperando a bordo de vehículos de carga, de transporte y particulares a que se reanude el paso y puedan llegar a sus destinos.

La Gobernación de Cundinamarca ha dispuesto de helicópteros de las Policía para atender la difícil situación y socorrer a quienes se encuentran en la zona, según las autoridades los puntos afectados son 100 y los deslizamientos de tierra y las afectaciones también han perjudicado a otras 13 poblaciones, sin embargo, Guayabetal registra la mayor gravedad y han tenido que ser evacuados los habitantes de docenas de casas.

Guayabetal ha tenido que soportar siempre las dificultades asociadas a los cierres de la vía al llano, padeciendo problemas como la falta de agua y largos cierres de los negocios, así sucedió antes de la pandemia, cuando los problemas de la vía obligaron a su cierre y los negocios del lugar duraron varios meses sin operar ocasionando gran afectación económica.

Varias casas se han visto afectadas por el desprendimiento de la bancada, dejando a muchas construcciones prácticamente en el filo de las montañas con riesgo de irse abajo y en un video se puede evidenciar cómo algunas de estas colapsan.