Consejo de Estado decide mantener investidura para el senador Gustavo Bolívar

El Consejo de Estado negó la demanda que pesaba sobre el senador Gustavo Bolívar en la que se le acusaba de ser supuesto financiador de la denominada ´primera línea´ durante el pasado paro nacional iniciado el 28 de abril.

El Consejo de Estado decidió mantener la investidura para el también escritor y libretista que representa la oposición política del país y que en días pasados anunció que debía abandonar el país por amenazas contra su vida y por la aparente falta de prestación de servicios de seguridad y protección a su persona, asunto que fue negado por la Unidad Nacional de Protección, UNP.

El tribunal tuvo en cuenta un concepto de la Procuraduría General de la Nación que señalaba que el movimiento de jóvenes de la primera línea no lo constituía un grupo político, de manera que una financiación no violaba las normas.

La demanda presentada contra el senador de 55 años y nacido en la población de Girardot en el departamento de Cundinamarca, sostenía que la primera línea se podría considerar como un movimiento político y de esa manera el congresista no podría realizar ninguna financiación porque así lo prohíbe el artículo 110 de la Constitución Política de Colombia para quienes desempeñaen funciones públicas.

Una de las razones para considerar a la denominada primera línea como movimiento político, es que un grupo de jóvenes que se reúne “como movimiento de clara naturaleza política y social que desea mediante la gestión colectiva de demandas en la calle, hacer valer su posición desde lo social y en democracia”.

El artículo 110 de la Constitución dice que “Se prohíbe a quienes desempeñan funciones públicas hacer contribución alguna a los partidos, movimientos o candidatos, o inducir a otros a que lo hagan”.

El senador Bolívar manifestó ante el Consejo de Estado que su intención nunca fue financiar un movimiento político y que el dinero que entregó fue directo a la fundación Manos Limpias Indignados Colombia que él preside.

La supuesta financiación se realizó a través de una colecta con el fin de dotar de elementos de protección como cascos y gafas a varios jóvenes manifestantes, esto como medida de protección ante los abusos de la Fuerza Pública, concretamente del Escuadrón Móvil Antidisturbios de la Policía Nacional (ESMAD).

Durante el pasado paro nacional muchos jóvenes terminaron con serias afectaciones en su salud y en sus cuerpos, fueron decenas los que perdieron sus ojos producto de las balas de goma disparadas por los agentes del orden que excedieron la fuerza en los choques contra los manifestantes, un asunto ampliamente documentado y denunciado, pero sin sanciones todavía.