Candidatos hablan de sistema alimentario justo

Los candidatos a la Alcaldía de Bogotá Gina Parody, Aurelio Suárez, Dionisio Araujo, Gustavo Petro y Jaime Castro se comprometieron con la consolidación de un sistema de abastecimiento alimentario más justo.

Colombia.com - Actualidad
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Los candidatos a la Alcaldía de Bogotá Gina Parody, Aurelio Suárez, Dionisio Araujo, Gustavo Petro y Jaime Castro se comprometieron con la consolidación de un sistema de abastecimiento alimentario más justo.

 El 23 de agosto, las organizaciones campesinas y comunales invitaron a los candidatos a la Alcaldía de Bogotá, a la Universidad de La Salle con el fin de que presentaran sus planes de política alimentaria.

El compromiso se dio durante el Foro sobre Economía Campesina y Abastecimiento alimentario para Bogotá, organizado por el Instituto Latinoamericano para una Sociedad y un Derecho Alternativos (ILSA) y el Comité de Interlocución Campesino y Comunal (CICC), con el apoyo de Oxfam y la Unión Europea.

Las organizaciones alertaron a la comunidad sobre cómo los principales productos de la canasta familiar se han visto afectados en los últimos 12 meses por varios problemas de abastecimiento. Esta situación ha significado un incremento en los precios, en algunos casos de más del 188%, y se prevé que las alzas continúen en progreso.

“Por causa, entre otras razones, de una excesiva intermediación y de la inexistencia de canales de comercialización apropiados, los capitalinos se ven abocados a una dramática inseguridad alimentaria donde cerca de 800.000 personas afirma no consumir una de las tres comidas diarias. Adicionalmente, los campesinos, que producen el 65% de la comida que se consume en la ciudad, viven en condiciones de pobreza y el 68% obtiene ingresos por debajo de un salario mínimo”, afirmó David Huey, de Oxfam.

Según el Plan Maestro de Abastecimiento y Seguridad Alimentaria para Bogotá (PMASAB), el 33% de los alimentos básicos que consume el Distrito se encuentra a una distancia de 40 kilómetros de la Capital, y cerca del 80% en un radio de 300 kilómetros. Por esta razón, los problemas de vías e infraestructura han generado un aumento desproporcionado en los costos de transporte, y grandes dificultades para el abastecimiento de la capital de la República donde residen más de ocho millones de habitantes.

Durante el foro, Jairo Rubio, miembro del CICC, en representación de las organizaciones campesinas y comunales, propuso entre otras cosas, que los mercados campesinos se consoliden dentro del Plan Maestro de Abastecimiento y Seguridad Alimentaria para Bogotá (PMASAB) con el propósito de garantizar una cobertura en las 20 localidades del Distrito, así como desarrollar una política de fortalecimiento y modernización de las plazas de mercado públicas.
 

Las perspectivas de los candidatos

El primer candidato en compartir su posición en el Foro de Economía Campesina fue el ex ministro Jaime Castro quien señaló que la ausencia de un marco institucional conduce a que se dediquen las mejores tierras cultivables a desarrollos industriales y residenciales. “Bogotá tiene destinados a usos industriales 600 hectáreas, mientras que los municipios de la Sabana de Bogotá y la cuenca alta del río, tienen 23.000 hectáreas. Un municipio como Cota está siendo invadido por el desarrollo industrial del país”, agregó Castro.

Por su parte, el candidato del Partido Conservador Dionisio Araujo afirmó que la desigualdad en la riqueza no es culpa de quienes progresaron “sino de los gobernantes que no invirtieron debidamente los recursos tributarios”. Araujo concluyó su participación invitando a las organizaciones campesinas para que sean “el órgano consultor” de su eventual Alcaldía frente a este tema.

Entre tanto, la ex senadora Gina Parody señaló que Bogotá tiene tres grandes retos: Frente a la pobreza, el 22% de los residentes en Bogotá vive con menos de 10.000 pesos al día; abastecimiento: Solo el 1% de lo que consume Bogotá se produce en la Capital y como tercer reto, abastecer a la región para combatir la pobreza. “Hay que hacer que Usme se vuelva la despensa de la ciudad y para ello hay que crear una red real logística de producción y consumo. Lo que hay hoy es una intermediación. El único intermediario debería ser el Distrito”, añadió.

A su vez, el candidato Gustavo Petro afirmó de manera categórica que todos los Tratados de Libre Comercio (TLC) afectan la producción alimenticia. Señaló que hoy hay un modelo funcionando en las superficies comerciales, pero advirtió que “Corabastos ha sido tomado por mafias que se toman el abastecimiento alimenticio de Bogotá”. Ante esta situación, Petro sugirió que el Distrito compre a Corabastos para tener un mayor poder de incidencia. De igual manera propuso la creación de un banco de primer piso que compita por el ahorro con los demás bancos y canalice ese esfuerzo hacia el ahorro: “Lo llamaré el Banco Muisca, de propiedad del Distrito. El Banco va a buscar empoderar a los productores campesinos”.

Finalmente, el candidato del POLO, Aurelio Suárez recordó que Colombia pasó de importar un millón de toneladas de productos básicos alimenticios a diez millones de toneladas y que por ello prometía movilizarse junto a las organizaciones campesinas para evitar la aprobación de los distintos TLC. “Hay que disminuir los precios de los alimentos; la peor privatización es la de la comida”.

Los productos básicos alimenticios aumentaron 24% en los últimos seis meses

En los últimos seis meses, el precio de los alimentos frescos que hacen parte de la canasta básica de los hogares, se ha incrementado un 24% en promedio. En particular, se destaca la variación del precio de los siguientes productos: naranja (188%), al pasar de $520 c/kg a $1.500; zanahoria (120%); papaya (66%); tomate chonto (62%); habichuela (37%); banano (37%); lechuga (33%), y curuba (28%). Todo esto evidencia un fuerte riesgo para la seguridad alimentaria de la población de Bogotá.

Las organizaciones campesinas y comunales solicitaron a los candidatos la presentación de planes frente a un problema que afecta directamente a consumidores y productores, poniendo sobre la mesa un tema diferente a los que generalmente manejan las diferentes campañas políticas.