El local Pierrick Fédrigo ganó la décimo quinta etapa del Tour de Francia
Bradley Wiggins continúa con el Malliot amarillo, cuando la competencia tendrá el martes su segundo día de descanso.

El francés Pierrick Fédrigo ganador de la décimo quinta etapa del Tour de Francia. Foto: EFE
Bradley Wiggins continúa con el Malliot amarillo, cuando la competencia tendrá el martes su segundo día de descanso.
El francés Pierrick Fédrigo (FDJ) venció la decimoquinta etapa del Tour de Francia disputada entre las localidades de Samatan y Pau, de 158,5 kilómetros, en una jornada en la que el británico Bradley Wiggins (Sky) no tuvo problemas para mantenerse líder.
Fédrigo, que se anota su cuarta victoria en la carrera francesa, venció al estadounidense Christian Vande Velde (Garmin) en la línea de meta, tras distanciarse los dos ciclistas de sus compañeros de escapada a falta de seis kilómetros para meta.
En esta ocasión el también francés Thomas Voeckler (Europcar) no fue el más listo de la fuga y, junto al danés Nicki Sorensen (Saxo Bank), al belga Dries Devenyns (Omega) y a su compatriota Samuel Dumoulin (Cofidis), no tuvieron opción de disputar la llegada.
La escapada de fue de las más difíciles de fraguar de este Tour, ya que los múltiples intereses de los equipos provocó un inicio de carrera descontrolado, al que se unió un terreno quebrado que hizo muy complicado tomar distancias.
Tras 62 kilómetros Voeckler, Vandevelde, Fédrigo, Dumoulin y Devenyns consiguieron abrir diferencias y, unos kilómetros después, Sorensen se unió al grupo.
Los seis fueron, poco a poco, aumentando las distancias ante un pelotón tranquilo, que se presentó en la meta de Pau a casi doce minutos, pensando más en la jornada de descanso de mañana y en las dos etapas posteriores en los Pirineos, donde se espera que se decida la carrera.
Fédrigo, que se anota su cuarta victoria en la carrera francesa, venció al estadounidense Christian Vande Velde (Garmin) en la línea de meta, tras distanciarse los dos ciclistas de sus compañeros de escapada a falta de seis kilómetros para meta.
En esta ocasión el también francés Thomas Voeckler (Europcar) no fue el más listo de la fuga y, junto al danés Nicki Sorensen (Saxo Bank), al belga Dries Devenyns (Omega) y a su compatriota Samuel Dumoulin (Cofidis), no tuvieron opción de disputar la llegada.
La escapada de fue de las más difíciles de fraguar de este Tour, ya que los múltiples intereses de los equipos provocó un inicio de carrera descontrolado, al que se unió un terreno quebrado que hizo muy complicado tomar distancias.
Tras 62 kilómetros Voeckler, Vandevelde, Fédrigo, Dumoulin y Devenyns consiguieron abrir diferencias y, unos kilómetros después, Sorensen se unió al grupo.
Los seis fueron, poco a poco, aumentando las distancias ante un pelotón tranquilo, que se presentó en la meta de Pau a casi doce minutos, pensando más en la jornada de descanso de mañana y en las dos etapas posteriores en los Pirineos, donde se espera que se decida la carrera.
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