Juan Linares contó su odisea en la etapa más dura del Dakar

Esta es la crónica del colombiano Juan Manuel Linares, conductor del camión 544 en el rally Dakar y quien duró dos días en completar la séptima jornada, sobre más de 700 km entre Uyuni, Bolivia, y Salta, Argentina:

Una etapa de no creer!!! Ni habíamos salido de Uyuni, en Bolivia, y tocó cambiar todo el puente (transmisión) delantero del otro camión de nuestro equipo. Después de jalar en la arena en puente para sacarlo y cambiarlo, nosotros salimos de Uyuni tipo 11 a.m. en una especial cronometrada con mucha arena y pistas rápidas. 

A los 70 km había una camioneta mini sin embrague. Dos polacos a los que no se les entendía nada. La jalamos unos 20 km y nos tocó soltarla porque encontramos el carro eléctrico que está compitiendo sin batería. 

El carro eléctrico tenía prioridad porque la mini podría esperar otro camión de que venía una hora atrás. Jalamos el carro eléctrico unos 100 km hasta la cima de la cordillera a 4.400 metro de altitud. En la cima lo soltamos y bajó con solo por inercia. Nosotros a los pocos km tuvimos un problema eléctrico que nos dejó el camión sin corriente. Solo faltaban 15 km para terminar la primera especial del día. 

Después de varias horas encontramos el ....... fusible que nos causó el problema y pudimos terminar la primera especial. Arrancamos la neutralización de 100 kms, por unos precipicios en carretera destapada del ancho del camión en barro y a 4.000 m. de altura, donde el fondo del precipicio no se veía!!! Muy muy muy asustador!! El cañón del Chicamocha es un chiste!!  Me acordé del programa de Discovery de las carreteras más peligrosas del mundo que en el que mostraban una en Bolivia igualita a la que estábamos!! 

Después de bajar en curvas en ‘S’ con este precipicio al lado, llegamos al valle donde debíamos pasar por un río por donde decía el libro de ruta pero se había crecido. Ni el camión pasaría por ahí. Llamamos por satelital y nos dieron instrucciones por dónde salir del río. Ya una vez en la ruta hicimos él tramo de neutralización de otros 100 km. Pasamos la frontera y dejamos Bolivia atrás!!! Gusto en conocerlos pero no quiero volver!! 30 km después de la frontera empezamos la segunda especial cronometrada.  Otros 100 kms de terreno agreste. 

Después de recorrer 44 km en una sábana árida de arena con huecos, nos llamaron de la organización: ”Señores 3 km atrás hay un Buggy con una persona pidiendo que lo ayuden”. Ya eran las 11 p.m. para entonces, regrésanos y el Buggy no estaba en la ruta. Se había salido y a buscarlo en esta gran sabana, nos tomó 2 horas más!! Lo encontramos en una gruta profunda q había hecho un río. Nuevamente enganchamos y a buscar la ruta nuevamente. 

Encontramos la ruta y estábamos jalando el Buggy cuando la hoja de ruta decía que la máxima velocidad era de 30 km por hora, nos preguntábamos porqué si era un camino estrecho y no estábamos cerca a poblaciones o personas para que nos limitarán la velocidad. Andamos 100 metros más y sorpresa!!! Una bajada con más precipicios y súper angosta, bajando en ‘S’ cada 50 metros. 

Empezamos a bajar y el camión no daba la curva en un solo movimiento. Eran tan cerradas que necesitábamos echar reversa. Pero con el Buggy atrás cada curva necesitaba de 8 a 10 movimientos para poderla hacer. Nuevamente lo logramos y eran las 12 de la noche. Finalmente a la 1am llegamos a la meta de la segunda especial.

Ahora 300 km más de enlace para llegar a Salta!! Esperemos llegar a salta sin novedad a la madrugada y descansar un poco!!

Este Dakar atrás con un camión brindando asistencia a mis compañeros ha sido una experiencia de no olvidar! En los 5 Dakares anteriores cuando necesité ayuda de otro competidor, esperaba que fuera un camión, rezaba que apareciera!! Ahora en este sexto Dakar quiero ser quien aparece a ayudar.

Juan Linares

Colombia.com