¿Cómo evitar errores psicológicos cuando haces trading?

El trading con CFDs requiere años de práctica y un amplio conocimiento de cómo funcionan las dinámicas de los mercados para poder maximizar los beneficios. Frente a inversiones de comprar y mantener, el trading en CFDs conlleva compras y ventas frecuentes. Por ese motivo, las emociones se hacen más patentes y resultan más peligrosas.

Algunas de las razones por las que las emociones provocan errores cuando haces trading con CFDs son la exposición a un riesgo innecesario, decisiones no alineadas con los objetivos de la cartera, que no va a resultar una experiencia positiva o placentera y que puedes tomar decisiones en base a ideas peligrosas, como intentar recuperar las pérdidas en lo que se denomina un trading de venganza.

El riesgo es inherente a las inversiones y al trading con CFD y hay que aprender a vivir con él. Sin embargo, un estudio previo de los valores en los que se invierte, estrategias de inversión como la diversificación -y otras muchas- permiten reducir el riesgo en una cartera y tomar decisiones más meditadas. 

No se trata de que no puedas invertir en base a una corazonada, sino que ayudes a que esa corazonada venga alimentada por un conocimiento del activo, de sus fundamentales, y de qué factores entran en juego.  No compres por el miedo a perderte la fiesta (FOMO) si no entiendes de qué va la fiesta, cómo ha surgido y qué puede hacer que termine.

Hay errores psicológicos en el trading que te llevan a saltarte tu propia estrategia o a tomar decisiones que no están en línea con tus objetivos. Debes planificar el trading con CFDs y atenerte al plan. De lo contrario, puedes meterte en un lío si inviertes más de lo presupuestado y te quedas sin liquidez o descompensas la cartera y un activo concreto pesa demasiado.

La estrategia se diseña conforme a los objetivos trazados en el plan de inversión. Por eso es muy importante mantener la calma y atenerse a los planes a medio y largo plazo, aunque pueda haber momentos de duda (emociones) en el día a día. Si tu estrategia se basaba en la lógica, los hechos y las cifras, puede soportar volatilidad a corto plazo. 

Invertir o hacer trading con CFDs es una experiencia divertida cuando se hace bien y no dejas que participen las emociones. Cuando la estrategia funciona y da resultados es cuando podemos dejar que las emociones fluyan porque sabemos que hicimos un buen trabajo de planificación y el beneficio no ha sido flor de un día. Pero antes, no.

Por último, otra de las razones por las que las emociones provocan errores cuando haces trading con CFDs es operar en base a ideas peligrosas, como intentar recuperar las pérdidas en lo que se denomina un trading de venganza. Si te saltas el plan y pierdes dinero, tus emociones te empujarán a tomar otra mala decisión con el fin de recuperar lo perdido lo antes posible. Este huracán emocional te costará dinero, seguro. 

Formas de controlar las emociones en el trading con CFDs

Para evitar que las emociones influyan demasiado en tus decisiones de inversión o de trading con CFDs debes formular tu estrategia en base a tus necesidades y conocimiento del mercado. Identifica los niveles de riesgo que puedes soportar y ajusta tus decisiones a ellos. Revisa tu plan de vez en cuando para estar seguro de que la estrategia funciona y tendrá sus resultados en el tiempo estimado.

También debes evitar el ruido del mercado porque es de allí de donde se alimentan las emociones. Los mercados suben y bajan y debes estar al corriente de lo que surja, pero sin dejar que los rumores y comentarios negativos pesen más de la cuenta. 

Por último, piensa de forma lógica y racional. Una cosa lleva a la otra y siempre debes preguntarte mientras haces trading con CFDs si esa decisión que acabas de tomar está meditada o está impulsada por las emociones y algún tipo de ruido procedente de los mercados. 

En conclusión, los seres humanos tenemos emociones, pero no invertimos con ellas porque nos arrastran a tomar malas decisiones. El trading con CFDs se beneficia de la volatilidad del mercado en los distintos activos. Si elaboras una buena estrategia sobre un activo que conoces como parte de las operaciones dentro de una cartera todo irá bien.

En cambio, si te dejas arrastrar por el ruido del mercado y te saltas una estrategia bien fundamentada y elaborada, si dejas que decidan tus emociones, vas a perder dinero seguro.