Las mentiras más comunes de un infiel

¿Todos los mentirosos son infieles? No. ¿Todos los infieles son mentirosos? Sí. Una persona infiel busca excusas que habiliten y justifiquen su conducta hacia su pareja.  

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¿Todos los mentirosos son infieles? No. ¿Todos los infieles son mentirosos? Sí. Una persona infiel busca excusas que habiliten y justifiquen su conducta hacia su pareja.  

¿Cómo identificarlos?  Muchos intentan llenar un vacío que ha sido generado por distintas razones. Utilizan diversas mentiras para que su comportamiento no sea criticado; pero ninguna de esas mentiras convence totalmente. A continuación, algunas mentiras que usted puede reconocer:   

1. Ver pornografía no es infidelidad A veces esta respuesta se funda en el argumento de que no conocemos a esa otra persona en la vida real; pero la verdad es que en la pareja de alguien que ve pornografía pueden surgir los mismos sentimientos heridos que si se tratara de una infidelidad con alguien en la vida “real”. 

  2. Son mayores las probabilidades de que los hombres tengan sexo con varias mujeres El matrimonio es un compromiso entre dos personas que se aman; de modo que el respeto debe ser mutuo. Involucrar a una tercera persona demuestra una falta de respeto por la pareja, por el matrimonio y por sí mismo. Esta conducta no exclusiva es común en los hombres pero también se da a menudo en mujeres.   

3. Ojos que no ven, corazón que no siente Lo que ella no sabe no puede lastimarla. Como dice el refrán “Es más fácil pescar a un ladrón que a un mentiroso”. Cuando ella descubra la mentira quizá sea demasiado tarde para salvar el matrimonio. Más allá de que ella vea o no lo que usted hace, de todos modos la relación se resiente.   

4. Una vez no cuenta Muchos infieles se dicen a sí mismos la mentira de que “Si esto pasó una vez no es necesario que se lo diga a mi esposa”. No importa cuántas veces sea, de todos modos es una infidelidad.   

5. Es TU culpa Muchas veces, la persona infiel culpa a su pareja de su conducta inapropiada. No obstante, para que una relación pueda repararse verdaderamente, echar culpas no es una opción.   Alguien que ha sido infiel debe estar dispuesto a pedir sinceramente perdón y la otra persona debe estar dispuesta a dárselo. 

La infidelidad no significa necesariamente falta de amor, de modo que en algunos casos es posible superarla.  Es cierto que no todos pueden perdonar con la misma rapidez, pero cuando se trabaja en equipo para lograr una relación más saludable y honesta, resulta mucho más fácil.  

No se equivoque –cualquier tipo de engaño los lastima a usted y a quienes están a su alrededor. Antes de actuar, piense.   

DN / Interlatin.com

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