Arabia Saudí condena a muerte a un crítico de su gobierno

Arabia Saudí vuelve a estar en el ojo del huracán por sus polémicas y “extremistas” medidas judiciales y penales. Recientemente fue sentenciado a muerte Mohamed bin Nasser al Ghamdi, hermano de un muy conocido activista saudí, por presuntamente publicar por medio de la red social X (antes Twitter) críticas en contra de la corrupción árabe y la precaria situación de derechos humanos que se vive en el país.

Informes locales confirmaron que la sentencia de muerte contra Mohammed se dictó el pasado 10 de julio, más de un año después de su arresto, que tuvo lugar en junio de 2022, según publicó el Centro del Golfo para los Derechos Humanos (CGHR).

Saeed bin Nasser al Ghamdi, académico de 62 años, reconocido activista y hermano del hoy sentenciado a muerte por las autoridades saudíes, denunció por redes sociales que el tribunal especializado en casos de terrorismo que juzgó a su pariente no aceptó los informes médicos que indican que el sentenciado padece "enfermedades neurológicas crónicas". El exiliado en Reino Unido desde 2018 también alegó que este tribunal no tuvo en cuenta que el perfil de X desde donde se realizaron las publicaciones de crítica y denuncia era "desconocido" y contaba con "solo nueve seguidores".

Pese a la tensión mediática y política, Saeed ha dicho públicamente que cree que esta sentencia a pena de muerte contra su hermano es falsa y solo se trataría de una estrategia para forzar su regreso al país árabe, pues los servicios de inteligencia saudíes han intentado repatriar al activista en numerosas ocasiones.

¿Por qué el interés de Arabia Saudita en el activista?

Su reputación se basa en la persistente lucha por exhibir y denunciar los atentados del gobierno saudí contra los derechos humanos. El académico exiliado ha sobrevivido a múltiples intentos de cacería que ha adelantado Arabia Saudita contra sus críticos, uno de los más feroces fue en el año 2017, donde muchos de los opositores al gobierno saudí fueron arrestados, sin embargo, Saeed bin Nasser al Ghamdi logró encontrar asilo político en Reino Unido y desde allí lidera una fundación que documenta violaciones de derechos humanos.

En el reino árabe las detenciones por oposición al régimen son algo que ya tiene tintes de sistematización, se estima que en el país se emiten al menos 81 sentencias de muertes diarias, una estadística que va en ascenso desde que el país está encabezado por el monarca Mohamed bin Salman.