El ex director de Estupefacientes se declara inocente

El ex director del ente que administra bienes decomisados a los narcotraficantes, organismo que fue intervenido la semana pasada, se declaró inocente ante el anuncio de distintas autoridades de abrirle una investigación preliminar por presuntas irregularidades.

Carlos Albornoz, quien fue titular de la Dirección Nacional de Estupefacientes (DNE), entre septiembre de 2006 y mayo de 2009, dijo ayer que es inocente, que está tranquilo ante las indagaciones, y pidió a la Procuraduría que emprenda cuanto antes las diligencias.

La Procuraduría anunció la apertura de una investigación preliminar contra Albornoz por el nombramiento de una "depositaria" de una sociedad intervenida a una persona propietaria de un condominio vacacional.

A esa denuncia se suma otra, que asegura que el periódico el Diario Deportivo, que el Estado le incautó a la mafia, dejó de circular agobiado por las deudas cuando fue devuelto a la DNE después de ser manejado por un amigo de Albornoz.

Albornoz, sin embargo, enfatizó en que ni la Procuraduría ni la Fiscalía le han notificado los cargos y que de ellos se ha enterado por la prensa.

El ex director de la DNE también señaló que él, pocos días después de asumir, ya había denunciado un "caos total" en la entidad, y que así lo publicó entonces el diario El Tiempo de manera destacada.

Albornoz enseñó a los periodistas la página en la que aparece su denuncia entonces, publicada por el matutino bogotano el 24 de septiembre de 2006.

Según el ex funcionario, el gran problema es que la DNE fue un ente creado para fijar y aplicar la política contra las drogas y no para administrar bienes decomisados al narcotráfico.

A esas irregularidades se agregan también denuncias de la Policía colombiana, según las cuales, las bases de datos de la DNE fueron adulteradas.

"Lo que está probado es que el sistema permitía modificar las bases de datos, modificar la identificación del bien, su valor, su custodio", reveló el pasado jueves a periodistas el director de la Policía Nacional, el general Óscar Naranjo.

Dos días antes, agentes de la Policía Judicial y de Investigación (Dijin), de la Procuraduría y de la Contraloría General ocuparon la sede central de la entidad en Bogotá.

La DNE administra cerca de 76.000 bienes decomisados a narcotraficantes y a corruptos.

Según explicó el día de la intervención el ministro del Interior y de Justicia, Germán Vargas Lleras, esa ocupación fue hecha tras detectarse "centenares de irregularidades" en el manejo de los bienes y a petición del recientemente designado director del ente, Juan Carlos Restrepo Piedrahita.