En Pasto entregan restos de tres adolescentes asesinadas en conflicto

Las adolescentes tenían 16, 17 y 18 años. A 31 de abril de 2014, en el departamento de Nariño a 31 de Abril de 2014 se han encontrado 165 cuerpos desde el 2007, de los cuales 114 han sido entregados

Esta diligencia judicial comenzó hoy jueves en horas de la mañana con el primer encuentro de las víctimas y los fiscales, investigadores, médicos forenses y sicólogos de la Unidad de Reparación y Atención a Víctimas, los cuales, a través de diversos talleres les brindarán atención jurídica, terapéutica y una completa explicación técnico científica de lo que fue el proceso de exhumación e identificación de los restos de los seres queridos.

Una de estas situaciones vivirá la familia Agreda, que recibirá los restos de una joven de 17 años, quien el 20 de marzo del 2001 fue asesinada por miembros de las AUC. Once años después y gracias a información de uno de sus familiares, un grupo de criminalística del CTI de la Fiscalía con apoyo de la Dijin de la Policía exhuman los restos de la menor en el cementerio de la vereda La Esmeralda, en Puerto Asís (Putumayo).

Entre las historias de los menores víctimas del conflicto, sobresale la de otra joven de 18 años que se encontraba embarazada al morir. Una de las hermanas de la víctima relató como uno hombres identificados como miembros de las Farc la asesinaron a ella y a su esposo, luego de que se negaran a salir de la vereda La Herradura, en Puerto Asís (Putumayo), lugar donde vivían.

Esta historia que empezó en mayo del 2011 con la muerte de los tres integrantes de esta familia sigue con la exhumación en marzo del 2010 del cadáver de la jóven que soñaba con terminar sus estudios y criar a su hijo finalizará por fin con la entrega de los restos a sus familiares.

Las investigaciones para determinar la muerte de la más pequeña de las jovenes que entregará mañana la Dirección Especializada de Justicia Transicional en la Casa Ejercicios Espirituales San Ignacio, ubicada en la calle 15 No. 32-00, de la ciudad de Pasto, aún continúan.

A sus 16 años vivía en la capital nariñense. Según relata su madre, el 16 de enero del 2007 las dos mujeres se trasladan hasta la vereda de Santa Rosa, en el Bajo Patia, lugar donde trabajaban en un hotel eralizando labores domésticas.  “Yo me levante (a) hacer todos los quehaceres pendientes en la discoteca en el hotel y a preparar el almuerzo y ella estaba en la calle. Como a las 11 y cuarto escuche tres tiros,  me asomé al balcón y la mire a ella tirada en el suelo. Bajé corriendo a verla y ya estaba muerta.  Habían dejado una nota que yo la recogí y decía:  ‘esta es la dosis para todos los sapos y su familia’. Esta nota la rompí porque si me llegaban a coger con esa nota me mataban”.

El 31 de octubre del 2013 se realiza la diligencia de exhumación del cuerpo de la menor en zona de cumbitara nariño y  tras estudios médicos, odontológicos y genéticos se logra su identificación plena.

Tras la ceremonia de entrega de restos, una comisión de la Fiscalía acompañará a todas las familias a los cementerios escogidos para la inhumación de los restos de sus seres queridos.