Nairo Quintana es el principal aspirante a discutir la jerarquía de Chris Froome

Aspirante a discutir la jerarquía de Chris Froome en el Tour de Francia, el colombiano Nairo Quintana empezó como un tiro la primera carrera de la temporada en suelo europeo, al conquistar la Vuelta a Cataluña, repleta de aspirantes a llevarse una de las tres grandes del año.

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En Boyacá entrenó de lo lindo durante los tres primeros meses de la temporada. El objetivo: afrontar con garantías la Vuelta a Cataluña, primer aperitivo de la batalla que en julio vivirá con Chris Froome (Sky) y Alberto Contador (Tinkoff), dos de sus principales rivales con vistas al Tour de Francia.

La Vuelta a Cataluña era para Nairo Quintana el tercer test de la temporada, aunque el primer momento a tener en cuenta del año. Después de estrenarse en el Tour de San Luis con un séptimo lugar y terminar cuarto en el Campeonato Nacional de Colombia, el nivel del subcampeón del Tour de Francia era una incógnita.

Al avión con destino a España también se subió su hermano Dayer Quintana, un gregario de confianza para completar un equipo pensado para proteger a su jefe de filas, aunque en la última jornada con final en Barcelona, sobrevivieron cinco de los ocho compañeros que le acompañaron en la salida.

Esperaba Nairo Quintana que el cambio de horario y las bajas temperaturas en los Pirineos no le pasaran factura. Detalles que no lastraron su rendimiento, más bien todo lo contrario. El ciclista de Boyacá demostró en las carreteras de Cataluña que afronta la temporada europea en un momento óptimo de forma.

Lo demostró en la etapa reina de la ronda catalana, con final en Port Ainé, un puerto de categoría especial con un desnivel medio del 6,8 %, donde atacó a Alberto Contador en los últimos 800 metros y se enfundó el maillot de líder, que no dejó escapar en las tres últimas etapas de la prueba.

Entre los muchos gallos que participaron en Cataluña, el madrileño fue el único que en la etapa reina intentó dar respuesta a Nairo Quintana, justo lo contrario que Chris Froome, quien decidió no entrar en la pelea y terminó octavo en la clasificación general, a 46 segundos del líder.

El británico que en la última etapa disputada este domingo en Barcelona sí que lo probó, aprovechó la Vuelta a Cataluña como banco de pruebas para coger la forma con vistas a las carreras veraniegas, cuando intentará repetir la victoria en París.

Aún así, Nairo Quintana puede decir que en la primera gran cita en la que coincide con sus rivales, él fue el mejor. Falta ver si dentro de cuatro meses, cuando el pelotón pise los puertos de los Pirineos y los Alpes en el Tour, será capaz de seguir marcando el ritmo entre los mejores.

En su cuarta participación en Cataluñaa, el jefe de filas del Movistar subió en lo más alto del cajón y se convirtió en el tercer colombiano en enfundarse el maillot de la Vuelta después de las victorias de Álvaro Mejía (1993) y Hernán Buenahora (1998).

Los próximos retos de Nairo Quintana: Vuelta al País Vasco, Lieja-Bastogne-Lieja y Tour de Romandia, aunque el sueño que persigue es enfundarse el maillot amarillo en los Campos Elíseos. En Cataluña dio el primer paso.

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