María José Arjona y la inmediatez actual, presentes en ARCOmadrid

La acción de Arjona tendrá lugar los días 27 y 28 de febrero en el CaixaForum de Madrid en el marco de la Feria Internacional de Arte Contemporáneo (ARCOmadrid), que se celebra hasta el 1 de marzo y que tiene a Colombia como país invitado de honor en esta edición.

En una entrevista con Efe, María José Arjona explicó cómo en la actualidad proponer una obra que dure diez horas "es un reto, donde le estoy exigiendo de alguna forma al espectador que se quede, que pare".

Es la primera vez que Arjona presenta una performance en España y la segunda que representa "Construyendo el tiempo", su primera creación en esta disciplina, hace ya doce años.

Arjona cuenta que con esta obra descubrió "el proceso y el rigor" y tuvo la oportunidad de trabajar con la fallecida María Teresa Hincapié, una destacada representante de este género en Colombia.

En estos años la colombiana ha trabajado en Estados Unidos, Italia, Suiza, Israel y Singapur y actualmente en Londres, en una residencia artística.

La artista defiende la presencia de obras de larga duración en las ferias de arte "porque muchas veces parece que la gente va corriendo de un lado a otro".

"Cada vez más, el arte contemporáneo se centra en la experiencia, no tanto en lo material sino en qué participa el público, en cómo puede activar la obra", explicó.

En su performance "pasan cosas muy microscópicas, que si no te fijas en ella, a lo mejor piensas que son un aburrimiento", aseguró.

"Si ves el proceso con la arena, te das cuenta de que ese es el proceso del tiempo, que no se puede contener, ni retener y en donde quedan muchas cosas en el camino", dijo Arjona.

Sobre la interacción del público en la performance dijo: "siempre que haces una obra de larga duración, tienes claro que nadie se va a quedar todo el tiempo, pero van y vuelven y creo que ahí está la belleza de esas obras, que el espectador pueda decidir".

Una de las metas de la artista en su paso por Madrid es "empujar la idea de reactivar las piezas en performance", según dijo, al señalar que "podría haber enviado documentación de la obra, o enviar un vídeo para que se repita en loop pero nunca es lo mismo que la gente pase por la experiencia".

El legado de "reactivar" las performances se lo atribuye a Marina Abramovic, con la que trabajó en "The Artist is Present", la retrospectiva que se celebró sobre la serbia en el Museo de Arte Moderno (MoMA) de Nueva York en 2010.

Arjona empezó en esta especialidad "casi de accidente" ya que se formó previamente en danza contemporánea pero a consecuencia de un accidente no pudo volver a bailar.

"Al principio decía: 'esto no es lo mío', me hacía falta bailar, pero después me matriculé en la escuela de arte, empezamos a ver teorías y encontré unas fotocopias en blanco y negro en las que se explicaba una de las performances de Marina Abramovic y pensé que eso es lo que quería hacer", dijo.

Para la bogotana, sus inicios en esta disciplina artística fueron un proceso de "desaprender la parte coreográfica" para adentrarse en la performance.

Arjona reconoce que la danza sigue siendo una influencia a día de hoy, especialmente por la disciplina "necesaria para las obras de larga duración".

"Independientemente de los retos que presenta normalmente la performance, conceptualmente me gusta la idea del tiempo porque es la vida y es la muerte", manifestó.

La artista confesó que uno de los objetivos de su performance es "aprender a manejar las dimensiones, a veces piensas que el tiempo está totalmente apartado de uno y a la larga ves que tú mismo estás construyendo el tiempo".

"Muchos performers tienen retos físicos, ser muy agresivos con ellos mismos para expresar una idea y a mí me parece mucho más importante el proceso", concluyó. EFE