La barba de un presentador estrella de la BBC crea revuelo en el Reino Unido

Paxman, periodista y escritor de 63 años, conduce desde 1989 el programa nocturno "Newsnight", uno de los espacios de análisis de la actualidad más prestigiosos de la televisión británica.

La frase "Paxman beard" ("La barba de Paxman") se convirtió en tema del momento en Twitter pocos minutos después de que, a última hora de este lunes, el veterano periodista, conocido por sus incisivas entrevistas a políticos, abriera el programa en directo con un sobria americana negra, corbata roja y una barba plateada recortada con cuidado.

"Me he dejado barba durante los últimos veranos y de pronto me pregunté si era de verdad necesario afeitármela para presentar 'Newsnight'", explicó Paxman en un comunicado tras la polémica que suscitó su aspecto en las redes sociales.

El periodista defendió su derecho a aparecer con barba en la cadena pública británica: "Quizás la conserve o quizás me la afeite, pero en cualquier caso seré yo quien tome la decisión", afirmó.

"Excepto el Tío Albert en 'Only Fools and Horses' (serie de ficción de la BBC), Demis Roussos (cantante egipcio) y Abu Hamza (imán extremista), la BBC es normalmente tan pogonofóbica (aversión a las barbas) como el antiguo dictador de Albania Enver Hoxha", sentenció el periodista.

La polémica sobre la estética de Paxman no solo incendió Twitter, sino que ha saltado a los medios tradicionales como el diario The Guardian, que hoy abrió una encuesta sobre la cuestión entre sus lectores en la que el 66 por ciento de los participantes consideraron que la barba le siente bien a Paxman.

Las barbas tupidas son un fenómeno cíclico en el mundo de la moda: hace apenas dos semanas, el peluquero británico Brendan Murdock afirmaba en The Guardian que "en este momento es más popular que nunca".

Murdock presentó este verano una línea de productos dedicados al cuidado de la barba y aseguró que una quinta parte de los clientes que acuden a su cadena de peluquerías londinense lo hacen para arreglarse el bello facial. EFE