Parque de la 93

UN ALTO EN EL CAMINO

Ubicado en el norte de la ciudad entre carreras 11 y 13 y calles 93A Y 93B en el barrio Chicó Norte, este lugar se ha convertido en los últimos 25 años en un símbolo de la zona y en un referente para la población que lo tiene como punto de encuentro, ubicación, relajación y descanso. Este pequeño pulmón de la zona cuenta con un buen número de árboles y zonas verdes necesarias para la sana marcha de una gran metrópoli como lo es Bogotá.

Para una cita comercial es cuestión de todos los días escuchar: “En el parque de la 93 nos vemos y adelantamos el negocio”, para una jornada de rumba: ¿Salimos a rumbear esta noche?, listo, vamos al parque de la 93, para un encuentro de amigos: tomémonos un café en el parque de la 93 y en la época decembrina: ¡Vamos a ver las luces navideñas al parque de la 93!

El parque de la 93 es un lugar exclusivo en cuyos alrededores los bares, cines, centros comerciales, restaurantes y cafés de gran prestigio se han establecido para ofrecer lo mejor de sus ofertas, de igual manera la zona está compuesta por hoteles de primera categoría, oficinas y sedes de importantes empresas e instituciones privadas y públicas que lo convierten en un sitio de importante convocatoria y en un atractivo turístico para nacionales y extranjeros.

Esta zona muy querida por muchos bogotanos no siempre fue digna para mostrar pues por décadas funcionó como un botadero de escombros pero con la unión del gobierno distrital y la empresa privada, se logró transformar y convertir en lo que hoy en día es, ya no es un lugar de moda, es un espacio en donde la moda tiene su lugar.

El Parque de la calle 93 no solo alberga recintos de diversión y de alimento corporal, también es sede temporal del arte, pues su suelo ha reunido exposiciones fotográficas y plásticas como la del Museo del Prado, ferias del libro, conciertos y recitales de música clásica, ópera, jazz y demás géneros y festivales para que los capitalinos y visitantes de todos los rincones de la patria y el mundo se sientan como en casa.

Pero como sinónimo de alegría y esparcimiento, se adecúa una pista de patinaje sobre el hielo y es sitio de convergencia multitudinaria que ha sufrido, gritado, cantado y celebrado con las actuaciones de la selección colombiana de fútbol en distintos eventos internacionales en los que ha participado.

Es el Parque de la 93 un lugar ideal para recorrer y ser testigo de que la vida urbana clama por mayores espacios como este, lugares que le dan vitalidad a la ciudad y que muestran una cara amable y refinada de la gran capital de la República. Cuando a Bogotá venga, dirija su brújula hacia el norte y dese un tiempo de calma en el Parque de la 93, seguro que le va a gustar.