Consejos para hacer de una cita algo sin guión y original

Si piensas en una cita especial, ¿qué es lo primero que te viene a la mente? Seguramente, una cena romántica en un sitio con estilo. Tú, bien maquillada y vestida y él todo un caballero. Piensa en otras opciones.

Colombia.com - Vida y Estilo
Colombia.com - Vida y Estilo

Si piensas en una cita especial, ¿qué es lo primero que te viene a la mente? Seguramente, una cena romántica en un sitio con estilo. Tú, bien maquillada y vestida y él todo un caballero. Piensa en otras opciones.

La ventaja de hacer algo diferente con tu cita es que los dos se salen del papel de “cita romántica para dos”. Ese escenario no tiene nada de malo, pero tal vez pueda limitarles a la hora de ser espontáneos, mostrarse como realmente son, En definitiva, salirse del guión.

A veces, es mucho más interesante improvisar y dejarse llevar por la energía del momento.

Tanto si se acaban de conocer y están descubriéndose mutuamente como si llevan tiempo juntos y no desean verse atrapados por la rutina, prueben a hacer algo que no han hecho antes y propónganse solo una cosa: divertirse.

Veamos algunas propuestas para una cita especial:

Salir de la ciudad. Si los dos viven en una zona urbana, aprovechen un día soleado para coger el coche (o el tren, tan romántico) y pasar el día fuera. Por ejemplo, tomando el sol en la playa. O haciendo un picnic en un claro del bosque o a la orilla de un lago. Si les gusta caminar, cálcense las botas de montaña y den un buen paseo revitalizante. Un paraje hermoso y una buena conversación pueden ser el aliciente perfecto para disfrutar de una caminata de horas. La jornada se puede rematar con una cena en un restaurante rural o un café caliente en un refugio con la chimenea encendida… Sugerente, ¿no?

Citarse a una hora desacostumbrada. Esta opción depende de la agenda de cada uno. Pero si coinciden en su día libre, ¿qué les parece quedar un lunes a las 11 de la mañana? A esa hora, la mayoría están trabajando y los cafés, museos o centros comerciales se encuentran semivacíos. Es ideal para disfrutar de una exhibición de arte, un brunch o simplemente un paseo relajado por una zona comercial.

Ir a ese sitio que les gustaba cuando eran pequeño. Y al que quizás no han vuelto en muchos años. Por ejemplo, muéstrale a tu amigo el pueblo en el que veraneabas cuando eras pequeña. Te dará pie a contarle cosas sobre tu infancia y permitir que te conozca mejor. Otros lugares interesantes para revisitar pueden ser un parque de atracciones, el zoológico o el café cercano a la antigua casa de sus padres.

Una cita sobre ruedas. Si les gusta conducir, ¿qué tal si eligen una carretera con bellas vistas y tráfico despejado? Un refresco y buena música pueden ser la compañía perfecta para viajar por el placer de viajar, moverse, conversar, contemplar otros lugares. Y si son aficionados a las motos, no se pierdan un paseo sobre dos ruedas. Erótico y estimulante. Pueden alquilar el vehículo si no lo tienen. Una tercera opción, para espíritus tranquilos y ecologistas, es dar el paseo en bicicleta. E incluso en barco.

Encontrarse en otro país. Como si fuera un juego. Compren los billetes al mismo tiempo, pero acudan a su destino por separado. Disfruten del placer de llegar al aeropuerto o a la estación de tren sin prisas, con la compañía de un buen libro. Viajen solos. Y luego encuéntrense en el aeropuerto o en la estación de destino y dispónganse a pasar un fin de semana inolvidable.