Por: Redacción Actualidad • Colombia.com

Economía mundial para el 2022: las perspectivas no parecen tan positivas

La economía mundial para el 2022 no cuenta con perspectivas tan positivas como las que se desean, de la euforia por la recuperación en el 2021 se pasó a incertidumbre porque la lucha contra la COVID-19 será más larga de lo que se creía.

El dólar y su precio seguirán siendo determinantes en la economía global durante el 2022. Foto: Pixabay
El dólar y su precio seguirán siendo determinantes en la economía global durante el 2022. Foto: Pixabay

La economía mundial para el 2022 no cuenta con perspectivas tan positivas como las que se desean, de la euforia por la recuperación en el 2021 se pasó a incertidumbre porque la lucha contra la COVID-19 será más larga de lo que se creía.

El año 2021 pasó a la historia como el segundo de la pandemia por la COVID-19 y durante el mismo el mundo se sacudió un poco del duro revés que las restricciones propias de la emergencia sanitaria le impusieron a las actividades humanas afectando a la economía.

El año 2020 significó en absoluto cataclismo en materia económica y en el año 2021 los esfuerzos se centraron en combatir la COVID-19 y levantar la golpeada economía mundial, pero fueron aquellos países con mayor poder para adquirir, distribuir y aplicar vacunas, quienes lograron enrutarse mejor hacia la recuperación.

Vacunarse significaba mejor protección contra la COVID-19 y la oportunidad de reestablecer diversas acciones que ayudaran en la reactivación económica de las naciones, que si bien no alcanzó la dinámica de años anteriores presentaba mejores números que en el 2020, incluso algunas naciones, incluidas las emergentes, pudieron reflejar un impulso sin precedentes, según sus autoridades, como es el caso de Colombia.

Luego de una euforia inicial por la posibilidad de darle impulso a la economía y por la aparición de vacunas contra la COVID-19, se creyó que la batalla contra esta enfermedad sería ganada en un tiempo no tan largo, pero este adversario ha sido uno de los más difíciles y ha hecho todo lo posible por mantenerse dando problemas, por eso ha mutado en variantes cada vez más contagiosas que las predecesoras.

Lo que antes era un gran ánimo, hoy es incertidumbre y optimismo moderado, porque la lucha contra el virus aún se encuentra lejos de ser ganada, además se ve con preocupación que las naciones ricas, aquellas que cuentan hasta con 5 vacunas para cada uno de sus habitantes, experimentan altos índices de contagios, especialmente porque un importante grupo de su población se opone a la vacunación.

El caso de los países pobre es dramático debido a que, en zonas como el África Subsahariana, menos del 4% de la población se encuentra vacunada, hecho que permite al virus moverse a sus anchas por el planeta.

China, el gigante mundial de la economía se encuentra en un periodo de lento avance y la inflación está haciendo de las suyas en varios países, debido a que, como se pudo evidenciar en los últimos meses de 2021, el desabastecimiento y la falta de materias primas, sumadas al problema de contenedores estancados en los puertos, no marca un feliz derrotero para este 2022.

El precio de los alimentos está aumentando debido al cambio climático, las inundaciones, sequías, veranos e inviernos drásticos y prolongados generan grandes emergencias y el asunto está lejos de detenerse porque no existen acciones concretas frente al problema del calentamiento global.

El aumento de los precios del petróleo, del dólar y la escasez de materias primas y de energía serán determinantes en el nuevo año y la recuperación económica, que, dicho por los especialistas, no tendrá el ritmo del 2021 y estará marcada por lo que se pueda hacer contra la COVID-19.