Papa León XIV bendice imágenes del Niño Jesús junto a cientos de niños en la Plaza San Pedro

El Papa León XIV fue protagonista este domingo de uno de los gestos más simbólicos y entrañables del calendario litúrgico, al encontrarse con un numeroso grupo de niños en la Plaza de San Pedro al término del rezo del Ángelus. 

Los pequeños acudieron llevando consigo las imágenes del Niño Jesús de sus pesebres, con el propósito de recibir la bendición papal en un acto que se enmarca en una tradición profundamente arraigada en la Iglesia católica durante el tiempo de Adviento.

La escena, marcada por un ambiente festivo y de recogimiento, reunió a más de 1.500 niños provenientes principalmente de la Diócesis de Roma, quienes colmaron la plaza vaticana acompañados de sus familias. El encuentro puso de relieve el énfasis del pontificado de León XIV en la cercanía pastoral con la niñez y en el valor del pesebre como signo central de la Navidad cristiana.

Esta costumbre tiene su origen en 1969, cuando el Papa Pablo VI impulsó por primera vez la bendición de las imágenes del Niño Jesús traídas por los niños. Desde entonces, el gesto se ha repetido de manera ininterrumpida cada año durante el Adviento, incluso en momentos complejos como la pandemia, cuando el Papa Francisco mantuvo viva la tradición adaptándola a las circunstancias.

Un mensaje especial para los niños y un llamado a la paz

Durante su intervención ante los niños reunidos en la plaza, el Papa León XIV dedicó un saludo especial a los pequeños de Roma, palabras que fueron recibidas con aplausos y expresiones de alegría por parte de los asistentes. El momento fue destacado por los canales oficiales de comunicación del Vaticano, que compartieron imágenes y fragmentos del encuentro.

En su mensaje, el Pontífice invitó a los niños a vivir la Navidad desde la oración y la sencillez, pidiéndoles que, frente al pesebre, eleven una súplica especial. León XIV solicitó que los pequeños recen también por las intenciones del Papa y, de manera particular, por la paz de todos los niños del mundo, subrayando la importancia de la oración como camino de esperanza en medio de los conflictos que afectan a la infancia en distintos países.

Además del gesto vivido en la Plaza de San Pedro, el Papa León XIV también utilizó sus redes sociales para profundizar en la reflexión espiritual propia de la temporada.