Pasajeros de avión en Brasil huyen aterrados ante aviso de explosión por parte de las azafatas

Escenas de absoluto pánico se vivieron en la pista del aeropuerto internacional Merechan Rondón de la ciudad brasileña de Cuiabá cuando el vuelo 2751 de la aerolínea Azul que llevaba 132 pasajeros en un avión Airbus A-320 se vio interrumpido por un poco convencional anuncio.

El vuelo que tenía como destino la ciudad de Guarulhos en el estado de Sao Paulo se encontraba listo para iniciar su maniobra de ubicación de posición para iniciar el despegue, sus turbinas ya se encontraban encendidas y todo parecía ir de manera normal cuando un aviso de las auxiliares de vuelo generó el caos.

Las azafatas anunciaron a los pasajeros que el avión explotaría, lo que ocasionó que todos viajeros entraran en pánico y que desesperados alcanzaran las puertas de emergencia para abandonar la nave aún con los motores en funcionamiento y lista para decolar.

Videos grabados por pasajeros en el interior de la aeronave documentan el terrible momento en el que muchos se agolpaban ante las escotillas esperando el despliegue de los toboganes para el abandono de emergencia del avión, desde luego, los gritos y la angustia se apoderaron de todos los allí presentes.

Entre los pasajeros había niños y una mujer embarazada y varios resultaron con heridas menores como raspaduras, la mujer embarazada y otra que sufrió una lesión en un tobillo fueron remitidas a centros hospitalarios para recibir atención médica.

Testigos del suceso contaron a medios locales que el pánico se apoderó de todos, especialmente cuando una de las puertas de emergencia no se podía abrir y no se podía desplegar el tobogán de evacuación, entonces el anuncio de las azafatas de que el avión explotaría en cualquier momento hizo que el terror cundiera.

La operación de la terminal aérea tuvo que ser suspendida por más de horas y la aerolínea envío un comunicado en el que lamentaba la situación presentada y que el incidente se había presentado por una falla eléctrica en el Airbus A-320, además manifestó que se encontraba brindando toda la atención necesaria a los pasajeros afectados por el incidente.

Una pasajera contó que el tobogán de evacuación de emergencia no logró desplegarse completamente y varias personas cayeron a la pista desde arriba, y otro pasajero que viajaba con su esposa e hijo, dijo que en la maniobra de carreteo el avión frenó bruscamente y un olor a quemado se expandió por la aeronave y fue ahí cuando apareció el angustiado anuncio de las azafatas.

Los ocupantes del avión denuncian que la gente empujaba a la que se encontraba a su paso desesperada por salir y que la ayuda tardó mucho en llegar.