Presidente Jair Bolsonaro afirma que la pandemia fue sobredimensionada

El mandatario del grande de Suramérica, Jair Bolsonaro, justificó sus medidas de no realizar una cuarentena estricta con la necesidad de enfrentar una situación económica que no pudiese ocasionar un peor desenlace para la población de la nación más afectada por el coronavirus en la región.

Bolsonaro, que, en temas como los incendios y el cambio climático en la región del Amazonas, ha tenido una posición cómplice, según sus opositores y analistas políticos, ha mostrado una particular postura frente a la pandemia porque su omisión al usar el tapabocas ha sido característica, además fue interpretada como un desafío, que tuvo un desenlace irónico porque la primera autoridad brasilera se vio contagiado de Covid-19.

Frente a las duras críticas internas y externas sobre su gestión de la pandemia en Brasil, Bolsonaro fue enfático al afirmar que si hubiese hecho caso a quedarse en casa y atender la economía después, seguramente estaría ante una situación muy difícil, hoy los análisis de los organismos económicos mundiales prevén que Brasil puede tener una recuperación más rápida que los restantes países de América Latina y también una de las que mejor panorama presenta en el mundo de cara a un fin de la pandemia.

Brasil dista mucho de parecer superar la crisis sanitaria, las cifras de 151.000 personas fallecidas y los 5 millones de personas infectadas no parecen ser un tema muy hablado por el presidente brasilero y en una reunión virtual con los Industriales del estado de Rio de Janeiro afirmó que la pandemia fue sobredimensionada.

Jair Bolsonaro, líder de la ultraderecha en Brasil es junto a Donald Trump, uno de los jefes de estado que con mayor ironía ha encarado el problema del Covid-19, sus opiniones sobre el tema siempre han sido controvertidas y le han restado importancia a un tema crucial para el mundo.

No es la primera vez que Bolsonaro resta importancia a temas de absoluta relevancia, durante los incendios en la Amazonía, prefirió culpar a quienes tienen objetivos estratégicos en la selva amazónica, en lugar de actuar de forma decidida, se dice que el presidente ha permitido la explotación minera y maderera descontrolada porque tiene intereses en juego.

Con relación a las medidas de cuarentena en su país criticó el actuar de gobernantes y alcaldes cuyos lineamientos pudieron paralizar la economía, un aspecto que parece quitarle el sueño porque con la pandemia, ni el haberla sufrido en carne propia lo ha hecho cambiar de parecer.