Sombrilla se incrustó en la pierna de un hombre en la playa luego de un fuerte ventarrón

Las playas de Mar del Plata son el destino apetecido por los argentinos en los días de verano, y en los meses de diciembre y enero son escenario de la navidad y el año nuevo anhelado por muchos viajeros, quienes viajan desde diferentes partes de la Argentina para gozar con el clima y el ambiente del lugar.

Sol, playa, brisa y mar son los ingredientes necesarios para unas vacaciones fabulosas, también son los componentes de un descanso o de la fiesta perfecta en esta época del año, pero también pueden ser parte de una historia que pocos pueden creer, pero que fue cierta, así muchos consideren que es una invención o uno de esos temas para el día de los Santos Inocentes.

En un hecho totalmente insólito, un hombre que vacacionaba junto con su novia en el famoso balneario argentino tuvo que interrumpir su placentera temporada debido a un suceso que se creía solo hacía parte de algunas descabelladas películas de terror, pues mientras descansaba en la playa una sombrilla se le clavó en una de sus piernas.

En pleno verano marplatense se presentaron fuertes vientos y estos ocasionaron que una sombrilla o parasol que protegía del sol a alguien en medio de la arena se elevara por los aires y su fuerte corriente la impulsó como un proyectil clavándose en una de las extremidades inferiores de un bañista.

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El infortunado hombre, cuya identidad fue revelada como la de Ignacio Mascarenhas de 31 años, sintió un dolor insoportable y no podía dar crédito a lo que estaba padeciendo, fue tan aterrador el momento que su novia quedó en shock y un surfista salió del agua para socorrerlo.

Mascarenhas fue atendido por un equipo de riesgos especiales y se necesitó de una motosierra para cortar la varilla que sujetaba la tela y luego ser conducido a un hospital de la zona para realizar una intervención especial que retiró completamente la varilla de su extremidad.

El drama de esta escena surrealista y, sobre todo, aterradora, se agudizó porque el hombre de 31 años tuvo que soportar los terribles dolores con la sombrilla incrustada en su pierna durante 30 minutos mientras llegaba la ayuda adecuada.

El bañista no pudo ser subido a la ambulancia porque la incrustación en su pierna no le permitía, entonces esta tuvo que ser cortada con una motosierra, pero esta llegó media hora después del insólito incidente, cuando fue retirado fue conducido al hospital Interzonal General de Agudos de Mar del Plata.

El docente y músico corrió con mucha suerte porque la incrustación no interesó ningún tendón, vena, arteria, nervio o vaso sanguíneo, por tal razón no sangró cuando le sacaron la varilla.