Con tamales a $12.000 y almojábanas a $9.000 se hizo contrato de alimentación del Esmad

Un detrimento patrimonial de más 800 millones de pesos fue denunciado por el concejal de Bogotá perteneciente al Parido de la U, Rubén Torrado, en un contrato para alimentar al Escuadrón Móvil Antidisturbios de la Policía Nacional y de la Brigada XIII del Ejército en la ciudad de Bogotá durante las protestas del año 2020, y en medio de la peor crisis social y económica atravesada por la capital con ocasión de la pandemia de la COVID-19.

El concejal señala que la Secretaría Distrital de Seguridad firmó un contrato por 13 meses con la Empresa Integral de Servicios para suministrar alimentos y bebidas a los organismos de seguridad del Distrito por $5.033 millones, luego se le adicionaron $2.516 con un total de $7.549.

Llama la atención que en este contrato el valor individual de una almojábana era de $9.350, el de un tamal, cuyo diminuto tamaño se evidenció en fotografías fue $12.000 y medio pollo $24.000.
El concejal criticó los estudios que se realizaron por parte de la entidad contratante del servicio, pues esta solo tuvo en cuenta cinco cotizaciones, algunas con valores muy por encima de los valores ajustados a la realidad, porque ofrecían el valor de medio pollo en $36.000 y $39.000.

El concejal asegura que realizó la tarea de cotizar en diferentes asaderos de la capital el combo de medio pollo que contrató el Distrito, que además de 4 presas contenía dos papas, dos arepas pequeñas, una chocolatina de 12 gramos y una gaseosa de 600 ml no retornable, y el valor promedio que logró cotizar fue de $17.500, una diferencia de $7.000 con respecto a los adquiridos por la ciudad.

“Solicito a los órganos de control para que pongan sus ojos sobre este contrato. Es una vergüenza absoluta que no hay quién cuide los recursos de los bogotanos. Si eso pasa con la comida, si hay sobrecostos con pollo asado, ¿cómo será con el resto de los bienes que adquiere la Secretaría?:motos, combustible, cámaras, radios, equipos de comunicación”, manifestó el cabildante distrital de Bogotá.

Torrado hizo cuentas y calculó el posible detrimento patrimonial en 871 millones de pesos, ahora que hizo la denuncia espera que las entidades de control se apersonen del caso e investiguen qué pasó realmente con este contrato, el 164 de 2020, y el dinero de la ciudad.