Día Internacional del Periodista, una profesión amenazada

Los académicos y expertos en la comunicación en Colombia seguramente sienten un escalofrío recorrer todo su cuerpo cuando a alguien que habla de asuntos frívolos se le llama periodista, abundan las vitrinas para que pseudo comunicadores den rienda suelta a su escasez.

El periodismo es un elemento importante en la construcción de la democracia y también en su destrucción, en países latinoamericanos como el nuestro se escucha constantemente la preponderancia de la libertad de prensa, esa que constituye la garantía de las libertades elementales que tenemos los seres humanos.

En Colombia no es un secreto que aquel que hable, muestre o denuncie aquello que no guste a otros sencillamente pone su vida en riesgo, la ley de las balas se ha impuesto sobre las voces valientes que en defensa de lo público jamás se resignaron a permitir una mordaza en sus bocas, la lista es tan grande, así como la indiferencia de gobiernos complacientes con la impunidad que desfilan y desfilan con los años viendo como en la mira de los francotiradores se encuentran comunicadores que no se resignan a que les impongan qué decir o cómo opinar.

Oscar Córdoba habla en exclusiva para Colombia.com. Foto: Colombia.com

Si tenemos que nombrar periodistas asesinados en nuestro país haría falta espacio, los ha habido muy famosos, dueños de medios y carismáticos, pero a diario, periodistas de provincia, esos que no gozan de la exhibición mediática de muchos, luchan contra las amenazas que grupos armados y políticos corruptos que no quieren que sus asuntos sean conocidos por la opinión.

La Sociedad Interamericana de Prensa sigue considerando que la profesión del periodismo en Colombia es una actividad de mucho riesgo porque así como en países del África, Asia o Centroamérica, a los enemigos de la democracia no les tiembla el dedo para apretar el gatillo.

Pero así como hay unos que se juegan su pellejo con cada noticia, columna, programa radial o editorial, existen otros que simplemente encontraron en la profesión una posibilidad de juntarse con las esferas del poder corrupto y de hacer de esto un gran negocio, porque sí que lo es. 

La actual tendencia es la de realizar un "Periodismo" cómodo y vocero del gobierno de turno, no olvidemos que hasta hace unos años existían en Colombia un gran número de noticieros de televisión y cada uno pertenecía a una dinastía política familiar que defendía sus intereses sobre los demás reduciéndole sustancia al verdadero sabor de la imparcialidad.

Con el nuevo milenio, los medios alternativos ofrecen inmediatez y tontería para un pueblo amaestrado que no puede siquiera tener un concepto real de la situación de su país, la farándula, los videos tontos, los memes y el odio en las redes sociales hacen curso poniendo en evidencia que eso llamado antes periodismo, hoy en día es una noción incomprendida en un país cuyos gobernantes no perdonan que se descubran las verdades de sus malas administraciones porque como en el caso de Noticias UNO, un noticiero de periodismo independiente y no arrodillado, era el vidrio en la media que había que acabar a como diera lugar.

8 de septiembre, Día Internacional del Periodista y en Colombia es como en el fútbol, existen muchos, muchísimos, pero pocos los buenos.

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