Disidencias confirman la muerte de Jesús Santrich en territorio venezolano

Cuando las versiones sobre la manera en que Jesús Santrich fue dado de baja abundan y aún no hay confirmación oficial por parte del gobierno colombiano ni del venezolano, cobra fuerza la versión de que un comando de mercenarios fue el encargado de abatir a Jesús Santrich para cobrar la recompensa que se ofrecía por él.

En el sitio web de las FARC-EP se confirma la muerte del líder guerrillero que desertó del plan de paz del gobierno colombiano para tomar nuevamente las armas agrupado en La Nueva Marquetalia, movimiento armado compuesto por disidentes de las Farc.

En esta página se asegura que el líder guerrillero de 53 años y nacido en Tolú Viejo, departamento de Sucre, cayó abatido por fuego cruzado en la parte venezolana de la serranía del Perijá, cuando la camionata en la que viajaba fue atacada con fuego de fusiles y explosiones de granadas.

La versión de la Nueva Marquetalia indicó que Seuxis Pauisas Hernández Solarte, alias “Jesús Santrich” cayó en una incursión de un grupo colombiano en territorio venezolano, en el vecino país cobra fuerza la versión, según la cual, un grupo de mercenarios que lo buscaba logró ubicarlo y asesinarlo para cobrar la recompensa que había por su cabeza.

Las disidencias aseguran que al cadáver de Jesús Santrich le fue amputado un dedo meñique para su identificación, pero frente a esta versión no se han referido las autoridades colombianas, que manifestaron no haber realizado ninguna incursión a territorio venezolano adelantando operaciones para la captura o abatimiento del líder guerrillero disidente.

Para el gobierno de Colombia si no hay confirmación de la muerte de Santrich, este seguirá siendo un prófugo de la justicia colombiana y también de la norteamericana que los busca para que pague por delitos de narcotráfico.

El viernes pasado la Corte Suprema de Justicia avaló la extradición de Jesús Santrich a los Estados Unidos haciendo caso a una corte de dicho país que lo acusó de crímenes relacionados con narcotráfico y cometido entre junio de 2017 y abril de 2018.

La Corte Distrital de los Estados Unidos del Distrito Sur de Nueva York lo acusa de tráfico de estupefacientes y concierto para delinquir.