Por: Juan Carlos García Sierra • Colombia.com

El semáforo de Bogotá que no dura nada en luz roja y que ni flash alcanza a pasar

La luz roja en el cruce de la Avenida Boyacá con calle 12 dura apenas 25 segundos y los peatones deben convertirse en flash para poder cruzar 8 carriles.
 

En Bogotá hay luces rojas en los semáforos que no duran ni un suspiro afectando a los peatones. Foto: Pixabay
En Bogotá hay luces rojas en los semáforos que no duran ni un suspiro afectando a los peatones. Foto: Pixabay

La luz roja en el cruce de la Avenida Boyacá con calle 12 dura apenas 25 segundos y los peatones deben convertirse en flash para poder cruzar 8 carriles.
 

Mientras existen en la ciudad de Bogotá semáforos cuya luz roja parece eterna existen otros que no duran un suspiro y ese es el padecimiento de los peatones que intentan cruzar la Avenida Boyacá a la altura de la calle 12 en el sector de Alsacia.

Los peatones que intentan cruzar el semáforo de esta intersección deberían ser medalla de oro olímpica en los 100 metros planos porque el tiempo que dura la luz roja es de 25 segundos, tiempo insuficiente para cruzar 4 carriles en cada sentido.

Solo Flash o Speedy González podrían cruzar en luz roja por esta intersección y por eso temen que si no se ajustan podrían ocurrir graves accidentes que podrían tener como víctimas a adultos y niños.

Arriba Bogotá, espacio matutino de City TV, tomó la cuenta del tiempo que dura encendida la luz roja y cronometró entre 20 y 30 segundos, apenas un suspiro, mientras que la luz verde tiene una duración cercana a los 2 minutos y medio.

Imprudencia que aumenta el riesgo

La situación es más difícil para los adultos mayores y los niños porque muchas personas en su afán de alcanzar a cruzar corren y los empujan, además motociclistas y ciclistas imprudentes también pasan por las cebras, y por eso solicitan a las autoridades encargadas de la movilidad y la semaforización de la ciudad que atiendan con urgencia este caso. 

Los semáforos parecen estar diseñados exclusivamente para los automóviles y se les da prioridad a ellos, entre tanto, los peatones son a quienes menos se tiene en cuenta sin importar que sus vidas son sagradas.

La falta de conciencia pone el asunto color de hormiga porque los conductores de vehículos particulares, motos, buses y transporte pesado de carga, una vez la luz se pone en verde, aceleran como si se tratara de una competencia de velocidad en la que se da largada.

Peatones y vecinos de la zona que deben arriesgar sus vidas en ‘la carrera de Alsacia’ aseguran que deben invertir un promedio de 5 minutos para pasar complemente, porque toca hacerlo ‘por partes’.

Desde la Secretaría de Movilidad de Bogotá indican que el tiempo que dura la luz verde de este paso semaforizado se debe a que existe un elevado flujo de vehículos en la zona y se comprometieron a estudiar la difícil situación de los peatones en este punto de la atiborrada capital de la República en una de las vías más congestionadas y con algunos tramos en los que los trancones parecen eternos.