Secretaría de salud de Bogotá niega que hornos crematorios hayan colapsado

El número de fallecidos por la COVID-19 en Colombia se encuentra en franco aumento desde hace más de un mes, las aglomeraciones producidas por las protestas sociales y el relajamiento en la práctica de las normas de seguridad, sumados a las reuniones y festividades, han contribuido a que la situación se torne dramática, sin embargo, las autoridades gubernamentales mantiene la política de reapertura, a tal punto, que se contempla en la capital, el retorno de público en espectáculos deportivos y musicales.

Bogotá continúa siendo el principal foco de la COVID-19 en el país, la ciudad capital registra el mayor número de contagiados y de fallecidos y la ocupación de las Unidades de Cuidado Intensivo en sus centros hospitalarios está prácticamente copada, situación que no se diferencia mucho en el resto de la nación.

El anuncio de las autoridades distritales, según el cual, las funerarias deben llevar a dos cementerios públicos los cuerpos de fallecidos para su inhumación, despertó la preocupación de la ciudadanía porque supuso el colapso de los hornos crematorios de la ciudad.

Actualmente las funerarias denuncian que no pueden recibir más cuerpos de personas fallecidas por la COVID-19 porque  no dan abasto, pero la Secretaría de Salud de Bogotá anunció que cuenta con seis hornos crematorios de carácter público y siete de carácter privado, lo que le permite la cremación de 180 cadáveres diarios.

El secretario distrital de Salud de Bogotá, Alejandro Gómez, salió al paso de las afirmaciones de supuesto colapso de los hornos afirmando que además de la cremación se realiza la inhumación para evitar la saturación de los hornos crematorios que operan las 24 horas.

“La capacidad de cremación diaria de la ciudad asciende a 180 cadáveres por día, en este momento no se ha llenado esa capacidad. Los primeros que tienden a ocuparse son los hornos públicos, porque tenemos una tarifa más baja que los privados”, manifestó el funcionario.

El secretario añadió que pueden mantener hasta 320 cuerpos en el depósito de enfriamiento y que a pesar de que funerarias y hornos se encuentran en gran nivel de ocupación, en ningún momento se ha sobrepasado la capacidad de dichos elementos de cremación.