Tragedia en Santa Marta: Yaya, la creadora de contenido samaria, víctima de feminicidio por mano de su expareja

En una mañana llena de horror, la creadora de contenido samaria, Lisney Juliana Gómez, conocida afectuosamente como Yaya, fue hallada muerta el ocho de enero de 2024 en su residencia en el barrio Santa Fe de Santa Marta. Su trágica pérdida ha sumido en el dolor a amigos y familiares, quienes buscan respuestas sobre lo sucedido.

Lisney alquiló una habitación en el mencionado barrio, y la noche anterior a su muerte, su expareja la visitó. Vecinos reportaron haber escuchado gritos, señalando un posible altercado. Daniela Munive, amiga cercana de Yaya, expresó su indignación, destacando que la víctima no merecía un final tan cruel.

"Ella no se merecía eso, la gente me escribe a insultarme y a decirme que andaba en malos pasos. A ella la asesinó su expareja, un chirrete que nunca la quiso ni la valoró", comentó Munive, añadiendo la esperanza de que se haga justicia y el responsable sea encontrado.

El asesinato de Lisney Juliana Gómez se convierte en el primer caso de feminicidio registrado en Santa Marta en el año 2024, resaltando la persistencia de la violencia de género en la sociedad.

Fuentes policiales informaron que aún no se determina la causa exacta de la muerte. "De momento no se sabe si fue con arma de fuego, cuchillo o asfixiada, estamos trabajando por esclarecer lo sucedido (…) algunos vecinos han asegurado que un hombre ingresó al lugar horas antes de encontrarla sin vida", indicó un oficial a Santa Marta al Día.

Tras el trágico suceso, las autoridades emprendieron la búsqueda del presunto responsable del femicidio. Sin embargo, la situación tomó un giro cuando el comandante de la Policía Metropolitana, coronel Yasid Montaño, anunció que Mario Bastidas, expareja de Yaya, se entregó voluntariamente a las autoridades. Ahora, enfrenta cargos de feminicidio ante la Fiscalía.

El impacto de esta tragedia ha generado una ola de indignación en la sociedad, elevando la necesidad de abordar de manera urgente y efectiva el problema de la violencia de género. Organizaciones y activistas se unen para exigir justicia en este caso y para destacar la importancia de crear conciencia sobre la violencia contra las mujeres, con la esperanza de prevenir futuros casos similares.

La comunidad, consternada por la pérdida de Yaya, se moviliza para recordarla como una víctima inocente de la violencia que afecta a demasiadas mujeres en la sociedad actual. Su legado, ahora marcado por la tragedia, se convierte en un recordatorio de la urgencia de un cambio cultural y legal para erradicar la violencia de género.