US Open: María Sharapova y Roger Federer le dicen adiós al torneo

La española Carla Suárez dio la sorpresa al derrotar en dos sets a la rusa Maria Sharapova y disputará los cuartos de final del US Open ante la local Madison Keys.

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Suárez, trigésima cabeza de serie, igualó su mejor resultado en el torneo que logró en 2013, al superar justo en el día de su cumpleaños a una errática Sharapova por un doble 6-4 en apenas una hora y media de juego.

"Estoy muy contenta porque he jugado un gran partido, he disfrutado mucho", dijo la ganadora tras el choque.

Ahora, la española chocará con la estadounidense Keys (N.14), que se deshizo en dos mangas de la eslovaca Dominika Cibulkova (N.29) por 6-1, 6-3.

Sharapova llegó con un récord inmaculado de 22 victorias sin tropiezo en su carrera en el turno nocturno en la Arthur Ashe y con un balance de 4-1 ante Suárez, que reconoció que no pensó en el registro de su contrincante para afrontar el partido y bromeó con que, si lo conservaba, era porque contra ella "no había jugado nunca de noche".

Puedes ver: Así fue uno de los entrenamientos de la bella tenista María Sharapova en el US Open.

Tras una sanción de 15 meses entre 2016 y 2017 por consumo de Meldonium, un producto declarado dopante, la rusa estaba recuperando su mejor nivel y soñaba con volver a aspirar a un título del Grand Slam.

Sin embargo, no fue su noche. Sharapova terminó el partido con 38 errores no forzados y solamente 15 "winners", una losa demasiado grande a esas alturas de un gran campeonato. Por si fuera poco, los acompañó de ocho dobles faltas y su rival, en cambio, sí estuvo acertada.

Roger Federer también le dijo adiós al US Open.

El suizo Roger Federer perdió, contra todo pronóstico, ante el australiano John Millman, 55º del ranking de la ATP, y se despidió del US Open en octavos de final.

Federer, segunda raqueta del mundo y cinco veces ganador en las pistas duras de Nueva York, firmó uno de sus peores encuentros de los últimos tiempos y sucumbió por 6-3, 5-7, 6-7 (7/9), 6-7 (3/7) en tres horas y 33 minutos de juego.

"Aún no soy consciente, tengo tanto respeto por Roger (Federer) y por todo lo que ha hecho por este deporte... Es uno de mis héroes, no estaba a su mejor nivel pero me vale", declaró el feliz e incrédulo australiano.

Así, Millman se enfrentará en cuartos al serbio Novak Djokovic (N.6), que se deshizo del portugués Joao Sousa por 6-3, 6-4, 6-3.

Errático con su servicio, empeñado en dejar la pelota corta cerca de la red e irregular desde el fondo de la pista, Federer se diluyó con el paso de los juegos.

Tres "aces", tres dobles faltas, 45% de acierto en su primer saque, 15 "winners" y 15 errores no forzados eran la pizarra de una manga atípica. Y aún fue en la que mejor estuvo.

Y es que en la segunda, gozó de dos puntos de set pero se le escaparon ante la atenta mirada de personalidades tan variadas como el expresidente de Estados Unidos Bill Clinton, el técnico de los Golden State Warriors Steve Kerr o la actriz Sophie Turner, que da vida a Sansa Stark en "Juego de Tronos".

Federer necesitó un descanso. Pidió un ventilador para combatir los casi 30ºC de la noche neoyorquina, con una humedad que rozaba el 80%.

"Hacía mucho calor esta noche. Era una de esas noches en las que sentía que no recibía aire. No circulaba y lo pasé mal con el clima. Sudaba y sudaba cada vez más. John lo llevó mejor, es de uno de los sitios más húmedos del mundo como Brisbane", comentó en conferencia de prensa.