La importancia de las pausas durante las jornadas de estudio

Cuando estamos estudiando y se nos prolonga el tiempo realizando esta actividad, comenzamos a perder la concentración, a veces porque las horas frente a un tema nos agotan y también porque sencillamente nuestra mente no responde igual, entonces retener, comprender e interpretar información no se logra de manera eficiente, pero ¿qué hacer para estudiar mejor?

Muy sencillo, realiza pausas.

Estudios científicos realizados por años indican que es muy importante y absolutamente necesario que nos tomemos un descanso mientras estamos estudiando, para algunas personas, la capacidad para estudiar manteniendo la atención y la concentración es de aproximadamente 90 minutos, mientras que, para otros, es de 50 a 60 minutos.

Cuando rebasamos el tope del tiempo de nuestra capacidad para concentrarnos, no captamos bien, se torna confuso, e incluso, abandonamos la acción de aprender y nuestra mente divaga en pensamientos incoherentes o algunos a los que les damos más importancia que al tema de estudio.

Nuestra mente y nuestro cuerpo necesitan relajarse para poder recobrar fuerzas y rendir óptimamente por esa razón, el estudio debe ser priorizado en cuanto a tiempos de correcta absorción de información, entonces 20 a 30 minutos concentrados y muy atentos serán suficientes, pero por esa cantidad de tiempo se debe contar con espacios de descanso de 5 a 10 minutos, en ellos la mente se relaja y recupera su energía para continuar rindiendo de la mejor forma.

¿Qué hacer para descansar?

No se trata de tumbarse en un sofá o una cama y dormir, es muy importante buscar un espacio de tranquilidad y para ello son válidos los ejercicios de relajación y de profunda respiración tanto antes de estudiar como en el momento de descanso.

Para lograr una mejor comprensión de lo que se estudia es clave dormir bien previamente, 8 horas de sueño es lo indicado, también es importante tener un pasatiempo o pasear a tu mascota para manejar el estrés y optimizar la calidad en la capacidad de retener, comprender e interpretar.

No se debe forzar demasiado la capacidad para comprender, la mente va adquiriendo destreza en la medida en la que se le brindan herramientas para hacerlo, ella se adapta a condiciones ideales y cuando no la tiene, llega a su nivel máximo de retención, entonces aquello que se encuentra fuera de su rango no es comprendido y se queda en datos sin comprensión o fuera de contexto.

Debes tener en cuenta que debes procurar que el ambiente en el que estudies no te contamine, es decir, el ruido, las discusiones y las distracciones no son lo más recomendable, si es necesario, aléjate y busca un espacio en el que puedes tener tranquilidad, es por el bien de tu conocimiento y aprendizaje.

Dile no a los teléfonos celulares y aparatos electrónicos, que las redes sociales y tus amigos esperan mientras estudias, si no apagas tu teléfono tendrás una distracción permanente.

Ahora sabes que si te tomas un descanso prudente podrás aprender más y mejor, pero recuerda que cuando se trata de estudiar, es a estudiar, no pretendas hacer varias cosas a la vez porque no te será de ayuda; cada cosa a su debido tiempo.