Emiro Navarro contó que atropellaron a su abuelo y lo tienen hospitalizado

Emiro Navarro es un nombre que ha sonado mucho en los últimos días y al parecer seguirá dando mucho de qué hablar, se trata de un creador de contenido digital que ha ganado más renombre al ser uno de los cuatro finalistas de La Casa de los Famosos, reality que ya llegó a su fin dejando como ganador a Altafulla con más del 50% de los votos.

El abuelo de Emiro Navarro fue atropellado.

En medio de una entrevista con La Mega, el creador de contenido contó que su abuelo fue atropellado por un seguidor del programa como una forma de mandar un mensaje que claramente es de odio, “Costa no toca Costa”, fue la frase que lanzó el personaje antes de arrollar al señor de avanzada edad.

Resulta que el joven se enteró en su salida del reality, que su abuelo había recibido el odio por parte de los seguidores de otros participantes, contra a la personalidad que él mostró dentro de la competencia y no fue del agrado para muchos, incluso su mamá comentó en ocasiones que estaban siendo víctima de amenazas.

Su abuelo sufrió bastante el golpe, tanto así que en estos días fue operado por la gravedad de sus golpes y su edad, esto claramente puso a Emiro Navarro en una posición de culpa, pues cree que por su culpa y la exposición que tuvo en el reality, es que su familia ahora está pasando por un momento tan horroroso y sin duda reprochable.

“Y... Eh, atropellaron a mi abuelo y le dijeron que costa no toca costa. Y pues para mí fue muy difícil la noticia, porque yo puedo tolerar todo lo que digan sobre mí, puedan comentar sobre mí, pero cuando ya llega el punto en el que tocan a la familia y se meten con temas tan delicados como la vida que… o sea mi abuelo está hospitalizado, lo tuvieron que operar ayer” destacó Emiro. 

Este final del reality trajo consigo varios desmanes en la ciudad de quienes no estuvieron de acuerdo con los resultados, pero sin duda la peor parte se la está llevando el creador de contenido, pues pusieron en riesgo la vida de su abuelo por algo que finalmente es un reality, un juego o competencia, que no tiene nada que ver con su familia y muestra lo peor del ser humano.