La triste herencia de Michael Jackson: Deuda y litigios tras su muerte

Michael Jackson, el icónico cantante conocido por éxitos como "Thriller" y "Smooth Criminal", enfrentaba una deuda considerable de aproximadamente 500 millones de dólares al momento de su fallecimiento, según informó el portal estadounidense “E!News” citando documentos del patrimonio del artista.

Este saldo negativo se atribuyó en gran medida a los costos asociados con los preparativos de su planeada gira de conciertos "This Is It".

Los abogados del patrimonio de Jackson revelaron que sus finanzas estaban en "desorden" en 2009, año de su muerte a los 50 años, lo cual resultó en una significativa responsabilidad financiera con el promotor de la gira.

Además, señalaron que Jackson había realizado múltiples cambios en su equipo de gestión y asesores legales en los años previos a su deceso, lo que complicó la gestión de sus documentos financieros dispersos por todo el país.

Tras su muerte, los representantes legales del patrimonio de Jackson lograron eliminar la deuda pendiente y redimir con éxito su imagen y legado. Este esfuerzo fue realizado en beneficio de los beneficiarios de su fideicomiso, conocido como "Michael's Trust", que incluye a sus hijos Prince, Paris y Bigi "Blanket".

A pesar de que han pasado más de 15 años desde el fallecimiento de Jackson, los abogados aún lidian ocasionalmente con las repercusiones de las circunstancias financieras existentes en el momento de su muerte. El cantante dejó un legado musical imborrable con álbumes y canciones que marcaron época en la industria, como el mencionado "Thriller", el álbum más vendido de la historia.

Además de su legado artístico, Jackson también dejó un legado de litigios post-mortem: enfrentó más de media docena de demandas en todo el mundo y recibió más de 65 reclamos de acreedores, muchos de los cuales desencadenaron litigios prolongados.

El 25 de junio de 2009, Michael Jackson falleció trágicamente por una sobredosis de anestésicos en su residencia alquilada cerca de Bel Air, en Los Ángeles, un evento que conmocionó al mundo y puso en marcha una serie de procesos legales y administrativos complejos para resolver su patrimonio.