¿Cómo evitar que mi mascota se infecte con la viruela del mono?: recomendaciones de expertos

En los últimos días, la viruela del mono, también llamada Mpox ha encendido las alarmas a nivel mundial, luego de que la Organización Mundial de la Salud (OMS) la declarara como Emergencia de Salud Pública este viernes. 

Ante esta situación han surgido muchas dudas, una de ellas es si las mascotas también pueden contagiarse. La respuesta, según la Asociación de Epidemiología de Colombia es que sí, por lo que debemos tener en cuenta algunas recomendaciones para prevenir la infección en nuestros animales de compañía. 

El primer caso confirmado de un perro doméstico contagiado se registró en París, donde un perro de raza galgo italiano resultó infectado. El canino presentó ampollas luego de que sus dueños desarrollaran la viruela del mono, por lo que se cree que pudieron haberle transmitido la enfermedad. 

Este hecho ha provocado que las entidades presten más atención a la transmisión del virus entre especies. Cabe destacar que la viruela del mono se contagia a través del contacto físico cercano y vía sexual. 

Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC), entre los posibles síntomas que puede desarrollar un perro con Mpox están: erupciones o ampollas, falta de apetito, debilidad, letargo, tos, mocos y ojos llorosos.

La OMS ha emitido una serie de recomendaciones para evitar el contagio del virus tanto en animales como en humanos, como evitar la exposición con personas enfermas y mantener un sistema inmune saludable. También se aconseja el lavado de manos frecuente, el uso de ropa cubierta y la gestión adecuada de los residuos. 

Según la Asociación Epidemiológica de Colombia, es fundamental fortalecer la vigilancia y las medidas de detección temprana del virus. La entidad señala que es vital aislar a las personas infectadas o a quienes tengan sospecha de contagio. 

Por otro lado, la asociación destacó la importancia de la vacunación como mecanismo de prevención, sobre todo en personas con enfermedades de alto riesgo o que hayan tenido contacto con casos de contagio.