¿Qué pasó con el asteroide YR4?: Ahora va hacia la Luna, pero los científicos lo esperan con ansias

El asteroide YR4 fue una amenaza para el planeta Tierra hace unos meses, donde la NASA y otras entidades lo observaban de cerca para analizarlo cada segundo, pues debido a su gran tamaño podría generar un impacto severo en el planeta, por ende, se considera un cuerpo potencialmente peligroso.

Durante los meses de enero y febrero, el asteroide tuvo varios porcentajes de probabilidades en su choque con la Tierra y cambiaba constantemente, pues inicialmente tuvo una probabilidad de 1.6%, luego de 1,2% y lo último fue de 2.1% de colisión, pero a pesar de ser porcentajes bajos, la probabilidad se mantenía, generando preocupación en la humanidad.

Sin embargo, los días pasaron y las probabilidades fueron disminuyendo, pero tal parece que este será un asteroide que va y viene, pues este vuelve a estar en la mira de la comunidad científica, pero esta vez no por una coalición con el planeta Tierra sino con la Luna, según datos del Telescopio Espacial James Webb donde actualmente hay una probabilidad del 3,8%.

Según los datos y observaciones, este nuevo rumbo de coalición se daría igualmente para el año 2032, año en que se tenía previsto el impacto con el planeta. Por otro lado, se ha confirmado que el planeta está a salvo, pues su órbita ya no genera un riesgo con la trayectoria del YR4 gracias a las observaciones del Telescopio Espacial James Webb.

“Aún queda un 96,2% de probabilidades de que el asteroide no impacte contra la Luna”, dijo la NASA en un comunicado.

¿Qué pasa si el asteroide choca con la Luna?

A pesar de que las probabilidades son cambiantes y esta podría disminuir, hay alguna posibilidad de que la Luna sea el nuevo objetivo del asteroide YR4, pero esta nueva curva parece ser muy oportuna para la comunidad científica.

Al tener un choque con la Luna, sería la primera vez en que los científicos podrían ver como se forma un cráter en el satélite, gracias a la tecnología que hay en el momento y la que se podría generar en los próximos siete años. No obstante, este impacto no alcanzaría a alterar la órbita de la Luna, ni representaría riesgos en el planeta. 

Los científicos lograrían ver a detalle el impacto, comprobar las consecuencias y hasta analizar alguno de sus rastros con los rovers.

Telescopio James Webb

Este telescopio ha sido el encargado de brindar los datos a la NASA y entre lo más reciente se registra que el tamaño del asteroide disminuyó entre los 53 y 67 metros, es decir, el tamaño de un edificio de 10 pisos, sin embargo, esto no deja a un lado el gran impacto que ocasionaría.

Por su parte, Mark Burchell, científico espacial de la Universidad de Kent en Reino Unido, afirma que un impacto en la luna sería “un gran experimento y una oportunidad perfecta. Los telescopios ciertamente lo verían, diría yo, y hasta binoculares podrían observarlo”.

Durante el mes de abril, este asteroide no será visible para la NASA debido a su lejanía, por lo que será difícil de observarlo, no obstante, con ayuda del telescopio James Webb evitarán perderlo de vistos.